Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.

"El pueblo de Bellprat (Anoia) y el ecologismo caníbal"

 El incendio de la Conca de Barberà y Anoia arrasa sigue fuera de control

 El incendio de la Conca de Barberà y Anoia arrasa sigue fuera de control

Bellprat (Anoia) uno de esos pueblos pequeños y olvidados (pocos votos, poco interés). Este pueblo, que se hizo famoso el año pasado porque se quemó más de un tercio del municipio, aún huele a humo y sus montañas verdes, ahora negras, siguen ahí, esperando una solución.

Entretodos

Publica una carta del lector

Escribe un 'post' para publicar en la edición impresa y en la web

Ahora nos enfrentamos a otra catástrofe, el 'ecologismo caníbal', con el beneplácito y el orgullo de los gobiernos. Se están dando permisos para la instalación de un parque eólico, granjas solares y una línea MAT, todo a la vez.

Esto de la ecología es una idea muy loable hasta que te toca de pleno. Cuando en un pueblo tan pequeño te obligan a tener tanta instalación ecológica empiezas a pensar ¿qué es un ecologismo que destroza la naturaleza y arrasa los campos de cultivo para justificar la ecología? Ahora que se habla de escasez de cereales, se destrozan más de 300 hectáreas de cultivo para ser ecológicos. Arrasamos bosques para poner líneas MAT. Inutilizamos centenares de hectáreas para poner molinos. ¿Esto es ecologismo?

Ya no hay especuladores inmobiliarios, ahora son de energía verde; se crean empresas tan solo para quedarse con esos fondos verdes. Se cambian leyes para poder decir que "el territorio decide", pero deciden los propietarios, esos que están comprando gran cantidad de terreno para poner explotaciones 'ecológicas' (igual a fondos europeos) y propietarios que no viven en el pueblo y les trae sin cuidado lo que pase en el territorio. Y el pueblo sufre las consecuencias: despoblación, no hay suelo cultivable. Me pregunto si este es el ecologismo que queremos o es el que nos quieren vender.

Bellprat es un pueblo como tantos, pequeño, pintoresco, querido por los pocos habitantes que aún tiene. Nos gustaría que este ecologismo pasase de largo y que los bosques, campos y lo que se salvó del incendio siguieran tal cual. Esos pueblos que están tan amenazados por el 'ecologismo caníbal' tendrían que plantarse y decir “señores, cerramos el pueblo”.

Participaciones de loslectores

Másdebates