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Disolver las Cortes, el mayor poder de Pedro Sánchez

Sánchez, tras la votación del Congreso.

Sánchez, tras la votación del Congreso. / PIERRE-PHILIPPE MARCOU

Jesús Pichel

En nuestro sistema constitucional, es el Congreso de los Diputados quien elige al presidente del gobierno y quien puede cesarle negándole la confianza o aprobando una moción de censura contra él, como acaba de ocurrir. La permanencia en el cargo de un presidente del gobierno depende siempre, pues, de la mayoría que le respalde en el Congreso.

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El apoyo directo que tiene Pedro Sánchez es solo de 85 diputados (84 más el coaligado de NC), algo menos de un 25% de la cámara y, por tanto, necesitará apoyarse en grupos ajenos y heterogéneos (en quienes le acompañaron en la moción de censura o en otros) para sacar adelante sus iniciativas legislativas. Una tarea más que difícil, incluso si decidiera gobernar a golpe de reales decreto-ley (que a los 30 días deben debatirse en el Congreso).

Sánchez ganó la presidencia del gobierno y, con ella, dos poderes exclusivos: elegir al equipo de ministras y ministros que el rey nombra y, sobre todo, la potestad de disolver las Cortes y convocar elecciones cuando crea conveniente. Y tal como se presenta el resto de legislatura, probablemente sea ese el máximo poder que tenga para negociar con unos u otros.

Qué propuestas de su proyecto sea capaz de realizar el gobierno durante estos meses; en qué clave resolverá el PP la sucesión de Rajoy, si de renovación o de continuidad; qué hará Ciudadanos para no perder el paso y el peso ganado con su antinacionalismo periférico; cuál será la actitud de Iglesias ante las iniciativas del gobierno, abocado a ser a la vez socio y oposición, y cuáles sean las estrategias del secesionismo catalán y del nacionalismo vasco, si de confrontación o de colaboración para encontrar soluciones. Todo ello, sin duda influirá en el ánimo de los votantes. Y por ello mismo, la evolución real de las estimaciones de voto en los próximos meses (los sondeos propios y confidenciales que todos los partidos hacen para saber a qué atenerse) será fundamental a la hora de buscar, dar o retirar apoyos, o para disolver las Cortes.

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