Elecciones catalanas

Puigdemont condiciona un nuevo Govern con ERC a que haya un "frente común" en Madrid

El candidato de Junts propone agrupar las áreas económicas del ejecutivo en dos 'macroconselleries': una de economía, hacienda e infraestructuras y otra de empresa, trabajo, universidades e investigación

Anna Erra, en la cocina de los candidatos: "Hay que tratar a Aliança Catalana como a Vox, aunque sean independentistas"

Puigdemont confía en ser president aunque no haya mayoría independentista: "Tengo más opciones que Illa"

El candidato de Junts, Carles Puigdemont, acompañado de los número dos y tres de la lista, Anna Navarro y Josep Rull

El candidato de Junts, Carles Puigdemont, acompañado de los número dos y tres de la lista, Anna Navarro y Josep Rull

Carlota Camps

Carlota Camps

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Junts condicionará un nuevo Govern de coalición con ERC en la Generalitat a que haya un "frente común" a Madrid para negociar con el Gobierno. Así lo ha apuntado el expresident y de nuevo candidato de la formación, Carles Puigdemont, en un acto sobre economía celebrado este viernes por la mañana en Argelers, centro neurálgico de su campaña. Acompañado de los números dos y tres de la lista, Anna Navarro y Josep Rull, Puigdemont ha defendido que "todos los partidos" que formen parte de su Govern, si es que consigue armar una mayoría para liderarlo, deberán "comprometerse" a coordinar su acción en el Congreso de los Diputados.

Justamente, que no hubiera este "frente común" entre Junts y ERC la pasada legislatura fue uno de los motivos que llevó a los posconvergentes a romper el ejecutivo de Pere Aragonès en octubre de 2022. "Si vamos juntos, nuestra fortaleza se multiplica", ha razonado, tras volver a subordinar el 'sí' de sus siete diputados a los Presupuestos Generales del Estado, a que la Generalitat pueda recaudar y gestionar el 100% de los impuestos que se recaudan en Catalunya. En este punto, también ha anunciado una revisión de todos los tributos, que no ha concretado, aunque la formación promete en su programa la práctica supresión del impuesto de sucesiones entre los familiares más allegados.

"No podemos ser menos competitivos que otras comunidades autónomas, tenemos que dejar de pagar las rebajas de impuestos de la señora [Isabel Díaz] Ayuso", ha exclamado Puigdemont, tras asegurar que el problema es que se busca el dinero en "los bolsillos equivocados". Para Puigdemont, se debe bajar impuestos y suplir esta perdida de ingresos acabando con el "déficit fiscal". Asimismo, también ha reclamado gestionar infraestructuras como el puerto o el aeropuerto desde la Generalitat y ha acusado a Aena de "esconder" sus beneficios para financiar "otras operaciones ruinosas del Estado".

En este mismo acto sobre economía, en el que no se han aceptado preguntas, Puigdemont también ha apostado por agrupar las áreas económicas del ejecutivo en dos 'macroconselleries'. Por un lado, una que tenga competencias en economía, hacienda e infraestructuras, ahora repartidas en dos. Y otra que comprenda empresa, trabajo, universidades e investigación, en estos momentos también divididas en dos departamentos. Una decisión que considera que sería una "declaración de intenciones" de sus políticas, que asegura que irían encaminadas a potenciar las pequeñas y medianas empresas y también a los autónomos, y a dejar de tratarles como "potenciales defraudadores". "Queremos un Govern que entienda que sin desarrollo económico, no habrá desarrollo social", ha argumentado en este sentido.

Así, apelando a las pymes, ha hablado de crear un "marco catalán de relaciones laborales" y ha reprochado al Gobierno que esté "acostumbrado" a mirar "el tejido empresarial desde el palco del Bernabeu" en vez de hacerlo "desde Montilivi", como asegura que haría su Govern. Un guiño futbolístico hacia su equipo, el Girona, que este sábado se enfrenta al Barça.

La "máquina del fango" del PSC

Todo ello en un octavo de día de campaña electoral, que ha estado claramente marcado por la arenga del presidente de la UGT y candidato del PSC, Matías Carnero, contra Puigdemont, preguntándose en tono burlesco por qué no se hacía las fotos de la campaña en el "maletero" del coche y bromeando con que se marchó de España a escondidas y quizás "meado y cagado". El número cinco de la lista y jefe de campaña, Albert Batet, ha sido el encargado de responderle con dureza durante el mitin de la tarde, en el que ha acusado al PSC de "compartir fango" con PP y Vox. "Que no engañen a nadie más", ha espetado Batet visiblemente enfadado, tras denunciar que los socialistas son ahora "dignos sucesores" del Ciutadans "de Rivera y Arrimadas".

Puigdemont, en cambio, ha evitado el tono duro y entrar demasiado en la polémica, tratando de mantener una posición más institucional. En este sentido, ha asegurado que él no está aquí para revolcarse en "el fango", sino para hablar de lo que "necesita Catalunya", pero sí ha querido acusar al PSC de juego "sucio" e "indigno" y de haber enseñado "su verdadera cara". Con todo, ha vuelto a recriminar a los socialistas lo que considera que ha sido un "intento de españolización" de la campaña catalana y, tras la petición de Sánchez de votar a Illa para ganar a PP y Vox, Puigdemont ha recordado que no hay peligro de un gobierno de estas características en la Generalitat y ha asegurado que lo que se busca es confundir a los electores.