Mercado laboral

Catalunya crea en abril el doble de empleo que Madrid y se asoma a los 3,8 millones de ocupados

Girona y Tarragona tiran de la ocupación, aupados por la 'resaca' de contrataciones de la Semana Santa

La brecha salarial con la UE se dobla desde la crisis de 2008 y un español cobra hoy un 24% menos que un europeo

Trabajador de la construcción, en Lleida, durante una ola de calor.

Trabajador de la construcción, en Lleida, durante una ola de calor. / JORDI V. POU

Gabriel Ubieto

Gabriel Ubieto

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El mercado laboral catalán registró uno de los mejores meses de abril de su historia. Catalunya ganó 33.089 ocupados respecto a marzo, hasta alcanzar un total de 3,76 millones de trabajadores en activo. Nunca antes había habido tantos catalanas trabajando de manera simultánea y las buenas perspectivas para los próximos meses hacen presagiar que ya en mayo pudiere coronar la simbólica cota de los 3,8 millones de cotizantes.

El paro, por su parte, bajó en 7.359 personas respecto a marzo, hasta alcanzar los 337.030 desempleados en Catalunya. Es la cifra más baja de parados desde 2008.

Los datos publicados este lunes por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social muestran que, con permiso de abril del año pasado -que fue especialmente bueno y se benefició directamente de la campaña de Semana Santa-, Catalunya ha cerrado su mejor abril casi de la última década.

Si bien en términos absolutos fue Barcelona quien más nuevos ocupados aportó (+15.534), Girona (+9.579) y Tarragona (+9.087) fueron las provincias que, en términos relativos, más empujaron del empleo. Lleida, por su parte, registró un saldo negativo de 1.111 afiliados respecto a marzo.

"Estas cifras certifican la buena línea seguida durante esta legislatura, en la que creamos más ocupación que nunca y reducimos el paro a los niveles previos de la crisis de 2008", ha valorado el conseller de Empresa i Treball, Roger Torrent, en rueda de prensa. El dirigente republicano ha puesto en valor que en estos tres últimos años las políticas activas de empleo de la Generalitat han contribuido a reducir "casi en la mitad el paro de larga duración, pasando de 306.000 a 142.000 personas en menos de tres años".

Buenas expectativas para esta primavera

Si bien las empresas turísticas ya realizaron gran parte de las contrataciones para cubrir la Semana Santa en marzo, dado que esta cayó del 24 al 31 de marzo, el buen tiempo y las buenas perspectivas han alargado la firma de nuevos contratos. Salvo sorpresa mayúscula, la afiliación seguirá creciendo de manera continuada hasta el mes de agosto y Catalunya, beneficiada especialmente de la campaña de primavera-verano, seguirá ganando ocupados.

Si bien las expectativas para los próximos meses son buenas, también existe el riesgo de una cierta desaceleración en la creación de empleo, que desde las propias autoridades reconocen. "Costará mejorar las cifras porque cada vez el punto de partida es mejor", ha afirmado Torrent.

Los territorios costeros suelen registrar mejores números en el primer semestre del año y las provincias más de interior lucen mejor en la compartativa interterriotorial en el segundo semestre. Ejemplo de ello lo muestra el dispar balance entre las dos locomotoras económicas de España. Catalunya creó dos veces más empleo en abril que Madrid y si se amplia el foco a lo que va de 2024, la primera ha creado tres veces más que la segunda. La capital del Estado compite mejor en la segunda mitad del año, cuando en la campaña de otoño-invierno suele corregir ese diferencial.

Catalunya fue la tercera autonomía, después de Islas Baleares (+55.155) y Andalucía (+41.365), que más ocupados aportó al conjunto de España. El crecimiento de la afiliación fue, no obstante, transversal. Hasta el punto de que España logró batir el récord de 21 millones de trabajadores en activo.

Nunca antes en la historia del mercado laboral español había habido tantas personas ocupadas de manera simultánea. Plusmarca que da cuenta del buen momento que vive el empleo y en el que lleva instalado, pese a las perturbaciones que han ido surgiendo, como la crisis de precios o la guerra de Ucrania, desde la irrupción de la pandemia.