El Banco de España baja al 1,6% el crecimiento previsto para 2024 y recorta al 3,3% la inflación

La economía española se desacelerará aún con mas fuerza en 2024 y pasará a crecer a una tasa del 1,6%, un poco menos de lo que se podía esperar hace tres meses, al mismo tiempo que la inflación se situará también por debajo de lo que se esperaba, en el 3,3%, según las nuevas proyecciones económicas trimestrales publicadas este martes por el Banco de España. La previsión de crecimiento para 2024 que formula el organismo (1,6%) se sitúa cuatro décimas por debajo de la del Gobierno (4%).

El organismo prevé ahora que la inflación media se situará en 2024 en el 3,3%, un punto por debajo de lo que esperaba en septiembre, y esta corrección es consecuencia, sobre todo, de la moderación que están mostrando los precios energéticos en los mercados internacionales y de la decisión del Gobierno de España de prorrogar en 2024 la rebaja del IVA de alimentos (hasta junio) y de las bonificaciones al transporte público (hasta diciembre).

La proyección del Banco de España parte del supuesto de que el resto de las medidas antiinflación (rebaja del IVA de electricidad y gas, entre otras) caducarán el 31 de diciembre y que no serán prorrogadas en 2024. De no ser así (se espera que el Gobierno comunique su decisión la próxima semana), la proyección de inflación media para 2024 aún podría ser inferior al 3,3% que ahora estima el el Banco de España.

El impacto de los altos tipos de interés sobre la economía se agravará en 2024

El organismo prevé que el proceso de moderación de la inflación siga avanzando gradualmente en los próximos trimestres, de manera que una tasa media del 3,4% estimada para 2023, se reduzca hasta el 3,3% en 2024, para descender nuevamente en 2025 y 2026 hasta el 2% y el 1,9%.

Repunte en 2025

En cuanto a la evolución de la actividad económica, según las perspectivas actualizadas del Banco de España, el PIB pasará de crecer el 2,4% en 2023 a hacerlo solo el 1,6% en 2024. Esto son dos décimas menos de lo que el organismo proyectaba en septiembre (1,8%) y el recorte tiene que ver, sobre todo, con la mayor lentitud detectada en la ejecución de los fondos europeos y con una debilidad más pronunciada del consumo de las familias. A esto, el Banco de España une que en 2024 se prevé que se alcance el mayor impacto negativo del endurecimiento de la política monetaria y de los altos tipos de interés sobre la actividad económica.

El BCE mantiene los tipos y evita dar pistas sobre posibles bajadas en 2024

Así, la senda de crecimiento del PIB que ahora dibuja el Banco de España incluye una desaceleración de la economía entre 2023 y 2024 (desde el 2,4% hasta el 1,6%), antes de volver a acelerarse levemente en el bienio 2025-2026, cuando alcanzará tasas del 1,9% y el 1,7%.

En todo caso, si se compara con la media de la zona euro, las previsiones del Banco de España llevan a un crecimiento de la economía española (2,4%) que en 2023 cuadruplicará el de la media de la UEM (0,6%) y que lo duplicará en 2024 (1,6% frente a 0,8%). Para cada uno de los dos ejercicios de 2025 y 2026 el BCE prevé crecimientos del 1,5% para la economía de la zona euro.

Cuarto trimestre de 2023

De momento, el organismo que gobierna Pablo Hernández de Cos, estima que la economía española está creciendo al 0,3% en el cuarto trimestre de 2023, que es un tasa similar a la del tercer trimestre, cuando el PIB frenó su avance.

En efecto, el Banco de España detecta una moderación del consumo privado en el útlimo tramo de 2023.

"Esta moderación del consumo estaría reflejando, entre otros factores, la continuación del proceso de traslación del tensionamiento de la política monetaria al coste del crédito y una menor confianza de los consumidores, que habría contribuido recientemente a frenar la senda creciente que se venía observando en los últimos meses en lo relativo a la intención de hacer grandes compras en el futuro", subraya el informe trimestral sobre la economía española.

La encuesta sobre expectativas de los consumidores que confecciona el Banco Central Europeo BCE) apunta a que este menor dinamismo del gasto de las familias españolas podría continuar en los próximos trimestres.

El empuje de los trabajadores extranjeros

Por su parte, el ritmo de avance del empleo se habría estabilizado en el último trimestre del año y se habría visto favorecido, nuevamente, por el dinamismo que viene registrando el empleo de los trabajadores de nacionalidad extranjera. En el último año, estos explican algo más del 40 % del avance total de la afiliación, tras haber elevado su peso hasta el 12,8 % de los afiliados totales desde el entorno del 11 % que dichos trabajadores representaban a finales de 2019.

El Banco de España prevé que la tasa media de paro se reducirá desde el 12,9% de 2022 hata el 12,1% en 2023 y que mantendrá una leve senda descendente en el periodo entre 2024 y 2026, si bien permanecerá en el entorno del 11% de la población activa.

Los costes laborales unitarios, por su parte, presentan un "elevado crecimiento" a pesar de que se mantiene un repunte moderado de los salarios negociados (3,5% en media en 2023; el 4,1% para los convenios de nueva firma). El Banco de España advierte de que el aumento de los costes laborales no salariales (por ejemplo, cotizaciones sociales) y el débil comportamiento de la producitividad implica aumentos de los costes laborales unitarios por encima de los observados en el resto de países de al zona euro, "lo cual podría acabar afectando a la competitividad-precio de las empresas españolas".

Déficit público del 3,4% en 2024

Las proyecciones sobre el déficit público que realiza el Banco de España sitúan este desequilibrio en el 3,8% del PIB en 2023 (una décima por debajo del objetivo del Gobierno), pero anticipan que en 2024 alcanzará el 3,4% del PIB, que es una tasa cuatro décimas por encima del objetivo oficial, que conduciría al país al procedimiento de déficit excesivo.

En particular, el organismo observa que desde finales de 2022 el crecimiento de la recaudación se está situando por debajo de lo que correspondería a la situación macroeconómica y a las medidas fiscales adoptadas por el Gobierno.