Precios en máximos históricos

¿Quién puede pagarse un piso de alquiler en Barcelona?

Alquileres enloquecidos en Barcelona: menos contratos y 1.123 euros al mes

La 'Catalunya estancada': Los salarios reales son igual que hace 20 años y los trabajadores producen un 12% más

Alquiler de pisos en una inmobiliaria de Barcelona

Alquiler de pisos en una inmobiliaria de Barcelona / ELISENDA PONS

Gabriel Ubieto

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Los alquileres en Barcelona, como si de temperaturas en plena crisis climática se tratasen, llevan los últimos años batiendo récord tras récord. Los últimos datos publicados este lunes por el Incasol sitúan el precio medio de un arrendamiento en 1.123,5 euros al mes. Una cifra que, por si sola, devora prácticamente entero el equivalente al salario mínimo interprofesional (SMI), situado en 1.260 euros brutos (en 12 pagas). Y que provoca que haya profesiones que directamente ganan menos de lo que cuesta arrendar un piso y tensiona especialmente a los más jóvenes, que tienen que destinar hasta el 90% de sus ganancias.

El coste que pagan los barceloneses por arrendar un techo se ha casi triplicado en la última década. Concretamente, cuando los vecinos de Gràcia, Ciutat Vella o Nou Barris se perparaban para dejar las pesetas y empezar a contar en euros, una vivienda de arriendo costaba, de media, 408,27 euros mensuales. Hoy exige esos 1.123,5 euros, 2,75 veces más dinero. Un ritmo que no han podido seguir los salarios.

A principios de siglo un barcelonés cobraba, de media, 260.284 pesetas al mes, según recoge el departamento de estadística del Ayuntamiento de Barcelona. Lo que al cambio sería unos 1.564 euros brutos al mes. Ese salario medio se ha ido revalorizando y se situa en los 2.693 euros brutos al mes, según los últimos datos disponibles. Es decir, hoy es 1,7 veces superior. Un punto menos para el poder adquisitivo de la población.

Además, cabe recordar que el salario medio, si bien es la referencia más utilizada, suele estar fuertemente sesgado por el efecto alcista que imponen los salarios altos. Es decir, hay poca gente que cobra mucho, pero los pocos que hay empujan la media para arriba y eso da la sensación que los que cobran menos, cobran un poco más. Por ejemplo, en el conjunto de España el salario medio es de 2.158 euros brutos al mes. Pero el salario más frecuente, es decir, el que un mayor de trabajadores percibe, es de 1.541 euros brutos al mes.

Misión imposible para los jóvenes

Que los precios del alquiler hayan ido aumentando a un ritmo muy superior que los salarios obliga a los barceloneses a destinar, año tras año, una porción superior de su sueldo a pagar el arriendo. Si en el año 2000 el techo se comía un 26% del sueldo de una persona, hoy devora casi el 42%. Según el Banco de España, lo conveniente es no destinar más del 35% de la renta del inquilino.

No obstante, no todo el mundo tiene el mismo sueldo y entre determinados colectivos pagarse un piso para ellos solos es prácticamente misión imposible. Los jóvenes son el caso más evidente. Un menor de 25 años debe destinar el 89% de su salario para costear el arriendo de un piso.

No obstante, el colectivo de adultos entre 25 y 29 años son los que, comparativamente, peor parte se llevan. Y es que los sueldos han evolucionado con especial pobreza entre estos durante los últimos 10 años. Hasta el punto de que en 2010 debían destinar la mitad de su nómina a pagar ellos solos un piso y hoy dicho porcentaje supera el 60%. Dos profundas crisis de por medio, la financiera y luego la del covid, lo explican en parte.

A diferencia de otras cuestiones, la tensión inmobiliaria mejora con la edad, ya que los sueldos de los más veteranos son sensiblemente más elevados, de media.

Servir copas en Barcelona, vivir fuera

Muchos de esos jóvenes que tienen que hacer malabares para pagar el alquiler con sus actuales sueldos probablemente se dediquen a la hostelería. El peor remunerado, con diferencia, sector en la capital catalana. Hasta el punto de que el salario medio está por debajo del alquiler medio. Según el departamento de estadística del Ayuntamiento, un camarero, cocinero o limpia platos gana, de media, 1.105,8 euros al mes. Más de lo que le cuesta un piso.

Otras profesiones especialmente mal pagadas son los profesionales de servicios sociales, que deben destinar un 74% de su salario a pagar el arriendo si quieren vivir solos, los empleados de comercios (65%) y los administrativos (58,5%), entre otros.

En el otro lado de la balanza, quienes menos sufren para pagar un piso a un precio medio -otra cosa es que luego aspiren a más- son los empleados de banca, cuyo sueldo -4.806 euros brutos al mes- les permite tener que destinar solo el 23,4% de su nómina al arriendo. Esta es la única profesión dentro del catálogo estadístico del Ayuntamiento que debe destinar menos del 30% de sus ganancias a pagar el alquiler.

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