Altruismo de temporada Oferta variada

El texto de presentación dice:«El verano se acerca y colaborar con oenegés puede ser una opción perfecta. El turismo solidario ofrece viajar y conocer otras culturas ayudando a los demás». A continuación se puede elegir ir a cuidar macacos 15 días en un país africano o reconstruir una escuela en una aldea en los Andes.

Las ofertas llevan siempre un marchamo de una organización solidaria que propone actividades de voluntariado sin necesidad de ser especialista. También se apela al concepto de turismo responsable, es decir, ir a un país pobre donde todo gasto tiene por objeto beneficiar a la población indígena. Un buen catálogo de vacacionesdistintas se puede ver, por ejemplo, en la web suite101.net.

Perú, Marruecos o Gambia

Entre los reclamos para viajar con causa benéfica puede encontrarse una estancia de 15 días en Perú, con visitas a destinos turísticos clásicos y otros especialmente seleccionados. Todo por 2.000 euros, más un donativo de 150 para la asociación Tierra, Aire, Sol que promueve el viaje. También se puede pasar una semana en Babtaza, en el Rif marroquí, organizado por Cerai, la entidad que promueve la solidaridad con comunidades agrarias.

Si lo que preocupa, sobre todo, es causar el menor daño al medio ambiente puede elegirse alguna de las opciones que aparecen en la página de turismo solidario y sostenible en África, que tiene por objetivo dar trabajo a 1.000 mujeres emprendedoras en aquel continente. Hay foto de Ana Patricia Botín (Banesto) y la vicepresidenta María Teresa Fernández De la Vega avalando el proyecto. La recomendación: el hotel Mandina River Lodge junto al río, con habitaciones de calidad y paseos en canoa. Opción distinta a la de cientos de profesionales de la enfermería españoles que gastan sus vacaciones atendiendo a la Fundación para el Desarrollo de la Enfermería.

Así evoluciona lo que al principio era solo vocacional. Los veteranos de las oenegés como Ignasi Carreras (Institut de Innovació Social de Esade) no lo ven mal si se sabe distinguir. Una cosa es el «turismo de agencias de viaje para gente alternativa», otra participar en proyectos que requieren planificación, como los campos de trabajo («que te acaban cambiando la vida») o ser un profesional de sanidad o educación que si repite cada año acaba siendo formador de otros profesionales. Jaume Codina (Metges Sense Fronteres) es más estricto en la distinción:«Nosotros solo contratamos profesionales y desaconsejamos practicar la solidaridad en zonas de conflicto si no se tienen experiencia».

Basta con escribir en cualquier buscador de internet la expresión 'vacaciones solidarias' para encontrar decenas de propuestas para pasar el trimestre veraniego. En Google aparecen más de 260.000 resultados.