Copa del Rey

El Athletic condena los altercados de "ultras descerebrados" y el Atlético denuncia fallos de seguridad

Archivo - San Mamés

Archivo - San Mamés / Ricardo Larreina / AFP7 / Europa Press - Archivo

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Athletic Club ha condenado "sin paliativos" los incidentes ocurridos el jueves en las inmediaciones del estadio de San Mamés en la previa del partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid (3-0) de "ultras descerebrados", mientras que el conjunto rojiblanco denunció "el deficiente operativo de seguridad" y confirmó que no venderá entradas a seguidores del conjunto vizcaíno para el duelo de LaLiga EA Sports en el Cívitas Metropolitano.

Una persona fue detenida y seis ertzainas resultaron heridos con cortes y contusiones en los altercados, que se produjeron durante el acompañamiento a los equipos hasta el interior del estadio y también al final del partido. Grupos de alborotadores arrojaron contra los agentes botellas, vasos de cristal, objetos contundentes y artefactos pirotécnicos, tanto al inicio como al final del encuentro.

"Enorme desprestigio"

"El Athletic Club hace pública su condena sin paliativos de los incidentes acaecidos ayer en la explanada de San Mamés (...) Asimismo, el Athletic Club reitera su compromiso total por un fútbol sin violencia, donde no caben de ninguna de las maneras ni comportamientos incívicos ni actos vandálicos", señaló en un comunicado.

Así, el Athletic destacó el "desprestigio" que supone el comportamiento de estos "ultras descerebrados". "Los graves altercados sucedidos ayer en la explanada de San Mamés suponen un enorme desprestigio para nuestra ejemplar afición y para el propio Athletic Club", manifestó.

"Quienes provocaron los disturbios, lanzaron vallas, arrojaron botellas y, en definitiva, se comportaron como ultras descerebrados no representan al Athletic Club y merecen la reprobación y el rechazo de todos y todas los que realmente formamos la familia athleticzale", añadió la entidad bilbaína, que mostró su "afecto y solidaridad" con las personas heridas.

Caos total

Por su parte, el Atlético lamentó "los graves incidentes de seguridad" y denunció "el deficiente operativo de seguridad y el caos provocado por el comportamiento inaceptable de algunos aficionados radicales del Athletic Club, que causaron situaciones de alto riesgo, tanto para los aficionados atléticos como para los profesionales de los medios de comunicación y el personal de seguridad de ambos clubes".

El club colchonero cree que por estos incidentes el autobús del equipo "fue obligado a alterar su itinerario" hacia San Mamés y que tuvo que permanece en su interior "durante 35 minutos, a pesar de que el hotel de concentración se encontraba a escasos 500 metros" del recinto.

"Durante los días previos al partido, el Atlético de Madrid insistió en reiteradas ocasiones tanto al Athletic Club como a la Ertzaintza, de la necesidad de proteger adecuadamente tanto al primer equipo como, especialmente, a nuestros socios, que habían adquirido entradas para el encuentro, y se facilitó a los organizadores y autoridades la información pertinente con todo detalle (listado de aficionados, autobuses en los que se desplazaban, etc.)", añadió.

Socio herido

El Atlético también condenó "el gravísimo ataque" sufrido por un grupo de sus aficionados en un bar cercano a San Mamés y que "causó heridas de consideración a un socio atlético que tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario". El club confirmó que ha contactado con esta persona para interesarse por su estado de salud y que se ha puesto a su "disposición".

Además, advirtió que "lamentablemente, este incidente no fue un hecho aislado, dado que durante toda la jornada grupos de aficionados radicales amedrentaron y amenazaron a multitud" de sus seguidores, "entrando incluso en bares y restaurantes, para identificarles e intimidarles de forma violenta".

"La situación derivó en escenas de pánico que se intensificaron a las puertas del estadio, especialmente en el acceso de la afición visitante, entre los que se encontraban niños y familias, a pesar de que durante toda la tarde responsables de seguridad del Atlético de Madrid solicitaron, insistentemente, ayuda al Athletic Club y a la Ertzaintza para el refuerzo de las medidas de protección", remarcó.