El 'impacto Pau Cubarsí' en el Barça: un central adolescente que juega como "un veterano"

No juega Pau en su sitio. Sí, es central. Pero no es central zurdo, acostumbrado como andaba Pau Cubarsí a ejercer de central por el flanco derecho, mienteas iba fulminando categorías en La Masia, escuela de defensas tan diversos como Puyol o Piqué. Pero nadie lo diría viéndole jugar en el Barça con una autoridad que no corresponde con su DNI.

Acaba de cumplir 17 años y hasta Xavi, el técnico que con extrema valentía le ha abierto la puerta del Barça, quedó asombrado de lo que le está dando en este mes. No, no es un ni mes lo que lleva en la elite. Apenas 17 días. De Salamanca, la universitaria ciudad donde debutó ante Unionistas sustituyendo a Christensen, a Vitoria, el último lugar donde ha dejado Pau rastros de su gran calidad.

"Con el preparador físico Andrés hacíamos broma de que parece un veterano", contó el técnico, aún en la sala de prensa de Mendizorroza, revelando un comentario que intercambió con uno de sus ayudantes, excitados y, a la vez, aliviados ambos por ese reparador 1-3 al Alavés que le supone al entrenador, como él mismo diría, "otro vale de tranquilidad".

Tranquilidad en sus meses finales porque fue el propio Xavi quien dictaminó el final de su época, aburrido de sufrir "en el proceso de ser entrenador del Barça".

Ni siquiera le convencen las luces que irradian adolescentes, recién salidos de la ESO, que están comportándose como adultos, que han hecho ya la carrera universitaria, mejorados con Erasmus previos y Másters posteriores.

"La salida de balón de Pau es bestial pero no solo esto, en defensa es muy agresivo, no pierde duelos, estoy muy contento con él"

Xavi

— Técnico del Barça

Con Pau, además, se da algo curioso. Tiene el alma defensiva de Puyol y su salida de balón remite a la elegancia que desprendía Piqué. Pero no es copia de ninguno.

Tiene Pau vida propia, capaz como ha sido en seis tempestuosos partidos de un volcánico enero que se ha llevado por delante a Xavi, dejándole a Deco el enorme desafío de encontrar lo antes posible un entrenador que pilote el proyecto.

Defensa al que le apasiona defender

"La salida de balón de Pau es bestial pero no solo esto, en defensa es muy agresivo, no pierde duelos, estoy muy contento con él", contó Xavi, enamorado como está por un defensa que disfruta cuando roba un baló. Y eso, aunque parezca mentira, cada vez resulta más complejo de encontrar. Justo ahora en que los centrales cuestan una fortuna (Van Dijk, Stones, Ruben Dias, Militao, Alaba), a la altura de goleadores reputados, la aparición de Pau no tiene, tal vez, el impacto que ha supuesto el advenimiento de Lamine Yamal. Pero es igual de valioso.

Debutó ante el Unionistas, hizo una falta y vio una amarilla. Luego, ha completado cinco encuentros pulcros, elegantes, irradiando una inesperada fiabilidad pese a su extrema juventud

Central diestro, que brilla como si fuera zurdo. Defensa inteligente en la lectura del juego. Jugador limpio. Atrevido en el corte porque cuando va al suelo a pelear una pelota suele salir triunfador de esos duelos. Y, además, astuto porque no se traga los engaños. Tan solo lo ha regateado un jugador en esta temporada. Y fue en San Mamés.

Cinco partidos consecutivos sin cometer una falta

Es, además, preciso en el desplazamiento lejano (60% de acierto en sus pases), al tiempo que destaca también por su pulcritud. Y no solo con el balón sino porque lleva cinco partidos consecutivos (Alavés, Osasuna, Villarreal, Athletic y Betis) sin cometer ni una sola falta.

Juega con extrema limpieza. Solo cometió una infracción. Fue en su debut ante Unionistas. Salió en el descanso y a los 25 minutos (o sea, m. 70) hizo falta. Falta y tarjeta amarilla, la primera en el primer equipo. Desde entonces, ha transitado sigilosamente por el césped.

Y sin ser especialmente alto (mide Pau Cubarsí 1.82 m) no rehuye el contacto con los gigantescos delanteros que han desfilado delante suyo: Sorloth (Villarreal, 1.94 m) y Samu Omorodión (Alavés) son los dos últimos ejemplos. Va a buscarlos casi a campo ajeno, tiene la intuición para alejarse de ellos cuando la jugada lo requiere y no ha salido en foto alguna en medio del caos defensivo que ha inundado al Barça en este trágico primer mes del 2024.

Ahora, una vez ha reaparecido Iñigo Martínez, que ha encadenado dos lesiones musculares, quizá ya no haya tanto espacio para ese joven de Estanyol, hijo y nieto de una familia de carpinteros. Pero ahí anda él.

En un lugar donde no hay calma y en un club que devora jugadores camina tranquilo Pau Cubarsí dejando estampa de viejo central de todos los días. Defensa al que le apasiona defender. Moderno central. Defensa que disfruta con el balón en los pies.