La Fiscalía abre diligencias contra Rubiales por presunta agresión sexual a Jenni Hermoso

La Fiscalía de la Audiencia Nacional también ve indicios de agresión sexual en el beso que el presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, plantó en la boca a la jugadora de la selección nacional Jennifer Hermoso tras la victoria en Australia. Considera que a la vista de las manifestaciones realizadas por la jugadora el beso no fue consentido, y por ello abre diligencias de investigación, además de hacer ofrecimiento de acciones a Hermoso dándole la posibilidad de que en 15 días pueda formalizar una denuncia.

La decisión se adopta tras estudiar las seis denuncias presentadas por director del Centro de Formación para Entrenadores (CENAFE), Miguel Ángel Galán, y cinco particulares. El pasado viernes, la Fiscalía de Madrid remitió la primera de ellas a la Audiencia Nacional en un escrito en el que señalaba que veía posible delito en la conducta del directivo suspendido, si bien remitía el asunto a este órgano por ser el competente para, en su caso, abrir unas diligencias de investigación.

Hermoso no ha dado ningún paso en el sentido de denunciar al presidente de su federación ante los tribunales, si bien ha pedido "medidas ejemplares" contra Rubiales por parte de los órganos deportivos a través de un comunicado conjunto con el sindicato mayoritario del fútbol español, FUTPRO. 

No obstante, tras comparecencia del directivo ante la Asamblea de la Federación, donde éste dio una versión de los hechos en la que habló de que el beso había sido aceptado por la jugadora, Hermoso remitió a los medios un contundente comunicado en el que afirma que "en ningún momento" lo consintió. Añadió que se sintió "vulnerable y víctima de una agresión, un acto impulsivo, machista, fuera de lugar y sin ningún tipo de consentimiento" por su parte.

Declaraciones inéquívocas de la jugadora

A la vista de estas manifestaciones públicas, la Fiscalía entiende ahora que "el acto sexual sufrido" por la joven "no fue consentido", y añade que "atendido el momento extraprocesal en el que nos encontramos y lo inequívoco de sus declaraciones, es preciso determinar la trascendencia jurídica de las mismas".

Así, se abren diligencias por un presunto delito porque lo ocurrido podría encajar dentro del Código Penal, concretamente en el artículo 178 de la norma, que prevé pena de prisión de uno a cuatro años, como responsable de agresión sexual al que realice cualquier acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento. El plazo de prescripción del delito es de cinco años.

 La apertura de una investigación de oficio era motivo de estudio porque el tipo de delito que podría haberse cometido por Rubiales es de carácter semipúblico y precisa, en principio, denuncia de la persona agraviada. Si bien la ley permite a la Fiscalía actuar de oficio "ponderando los legítimos intereses" del caso concreto, la realidad es que los fiscales sólo suelen emprender acciones directamente cuando las víctimas son menores o personas con discapacidad. En cuanto a la competencia, corresponde a la Audiencia Nacional por ser posible delito cometido en el extranjero por español y ser la víctima es española.

Denuncia por exhibicionismo ante la infanta

Una de las denuncias que ahora estudia la Fiscalía refiere "la existencia de exhibicionismo obsceno ante menor de edad", refiriéndose al momento en el que Rubiales se tocó la entrepierna en presencia de la infanta Sofía al finalizar el encuentro, si bien el Ministerio Público no se refiere a estos hechos en el decreto que firma la teniente fiscal en funciones Marta Durántez, que será la encargada de las pesquisas. La documentación fue remitida desde Secretaría General Técnica de la Fiscalía General del Estado, que acompañó las seis denuncias presentadas con una nota interior.

El decreto concreta los hechos de la denuncia, consistentes en "dar un beso en la boca, mientras agarra con las dos manos la cabeza de la jugadora", que son los que entiende que podrían ser constitutivos de un delito de agresión sexual.

Las investigaciones son preprocesales, lo que quiere decir que están aún pendientes de llegar a un juez, y se abren tras tener constancia de que ningun juzgado ha abierto procedimiento alguno por lo sucedido. Entre las diligencias a practicar, el decreto de la Fiscalía incluye la averiguación del domicilio de Hermoso para poder realizar el ofrecimiento de acciones, proporcionándole "de forma sencilla y comprensible" las vías para realizar denuncia como "víctima de un presunto delito de agresión sexual".