El Barça celebra la Liga (con Neymar) y despide a Busquets en el restaurante-club Carpe Diem

Sin directiva y sin entrenadores, solos, pletóricos de alegría y haciendo piña, la plantilla del Barça salió de fiesta la noche del domingo para celebrar a lo grande haber ganado la Liga horas antes. Los jugadores eligieron el restaurante-club Carpe Diem, en el Front Marítim, para una emotiva noche en la que también tocó despedir a Sergio Busquets, su primer capitán. Neymar, que había volado a Barcelona y se alojaba a pocos metros en el Hotel Arts, se les unió sin dudar.

Pasada la medianoche, los jugadores fueron llegando con gran discreción en sus coches al aparcamiento contiguo que tiene acceso directo a la terraza del local del paseo Marítim, 32. Desde allí accedieron a la sala Morocco, al fondo del establecimiento, y con un gran cortinaje que permite independizar el espacio y darle intimidad. Allí estaban todos, o casi todos, según diversos testigos. No faltaron Lewandowski, Gavi, ni Pedri. De los capitanes a la nueva cantera con hambre de títulos, pero sin entrenadores ni directiva, solo jugadores dispuestos a pasarlo bien por unas horas.

Sushi a altas horas

Para la cena tardía tomaron una selección de sushi, una de las especialidades del restaurante de cocina de fusión. Y después disfrutaron de la velada, que como cada domingo estaba muy ambientada con la fiesta Vendetta que programa el club ese día, a ritmo de 'urban' y 'reggaeton'.

Los jugadores estuvieron tomando unas copas, charlando y pasando un buen rato hasta las seis de la mañana, siempre en la zona privada, que tan solo abandonaron para ir al baño en algún momento, a veces con personal de seguridad, pero en algunas ocasiones solos. Fue una noche de alegría, pero agridulce por la marcha de Sergio Busquets, que fue uno de los protagonistas de la velada y se despidió con brindis de sus compañeros. No se lo quiso perder Neymar, que según algunas fuentes previamente podría haber visitado el Casino en los bajos del Arts, como en otras visitas, dada su afición al póquer. El jugador del Paris Saint Germain, que está de baja, había volado horas antes a Barcelona. Ninguno de ellos quiso hacerse fotos en público.

Se da la circunstancia de que esta pequeña discoteca reconocida internacionalmente, que también eligieron para sus salidas en Barcelona artistas como Beyoncé (lo hizo para ver en un privado un Barça-Madrid) o los U2, acaba de reabrir hace tres semanas tras el cierre de 45 días que le impuso el ayuntamiento (por una fiesta de 2019). Y que se trata de uno de los locales, próximo a la Vila Olímpica y la Barceloneta, que el gobierno de Ada Colau quiere cerrar en los próximos años para erradicar el ocio del litoral barcelonés.