El tercer cuarto basta al Barça para batir al Iberostar (77-73)

El tercer cuarto, saldado por 20-7, sirvió al Barça para batir al Iberostar, un rival que tenía atravesado desde hace dos años. Perdió los otros tres parciales, el último emborronado por un 0-15 en el último minuto y medio, que afeó el solvente partido azulgrana, que no se dejó sorprender por segunda vez tras haber caído el jueves ante el Buducnost en la Euroliga. Frente al Iberostar estaba avisado por la buena marcha de los tinerfeños, y el Barça Lassa se aplicó (77-73) una vez sentenció el duelo para seguir disfrutando del liderato de la ACB en solitario.

Acabó el encuentro con el último arreón visitante. Igual que había sucedido en el comienzo. Del 0-6 con dos triples de Mc Fadden se pasó a un parcial de 15-2 mediante Singleton y Pangos y una réplica canaria de 2-13 con más triples, esta vez de Saiz, que sumó 9 puntos en esa fase. Mc Fadden (8) e Iverson (4) acumularon la producción del Iberostar, mucho más repartida en las filas locales, por cuanto anotaron siete jugadores distintos.

Pero a los de Pesic, quién lo diría, les faltó inicialmente la aportación del banquillo. La suplencia les sentó mal a Heurtel y Tomic. Ninguno cogió el ritmo, y acumularon rápidamente dos personales cada uno, con lo que apenas jugaron cinco y cuatro minutos respectivamente. Nada preocupante porque Pangos y Pustovyi (6 puntos) aguantaban el tipo sin poder igualar los maravillosos registros de Mc Fadden (14) y Saiz (12), con tres triples sin fallo.

Heurtel y Tomic, tras el descanso

Pesic corrigió su decisión inicial e introdujo a Heurtel y Tomic de inicio tras el descanso, y entre ambos voltearon el resultado, marcando el compás del parcial que permitió al Barça asentarse en el partido y encarrilar la victoria. Entonces sí se vio la calidad del banquillo barcelonista, que siguió aportando con regularidad mientras en las filas visitantes nadie tomaba el relevo de McFadden (no sumó después del descanso) ni de Saiz (cuatro puntos en la reanudación).

Falto de dirección por la mala noche de sus bases (los del Barça se repartieron a partes iguales 22 puntos), el Iberostar se obstinó en seguir tirando triples (35 intentos, por solo 19 de dos) con la esperanza de recuperar la inspiración perdida.

El Barça, en cambio, apostó por la opción contraria. Sabiéndose más poderoso técnicamente, metió balones dentro para aprovechar la buena mano de Tomic, la de un mejorado Pustovyi y, sobre todo, la constancia de Singleton, que dominó los dos tableros y firmó un doble de 12 puntos y 12 rebotes.