El mal trago de Jesé

Ha soplado el jueves las velas por su 22 cumpleaños junto a Pepe, que cumplía 32, pero Jesé Rodríguez Ruiz revive sus viejos fantasmas al comprobar que apenas tiene peso en el equipo. En marzo del 2014 se rompió el ligamento cruzado y volvió en diciembre del 2014. Desde entonces ha comprobado que Ancelotti no cuenta con él. Lo demuestra los 278 minutos que ha disputado desde que volvió a jugar en Copa ante el Cornellà el 2 de diciembre del pasado año. El último episodio de soledad lo ha vivido en la banda del Martínez Valero, en Elx, donde se hartó de calentar antes de saltar al campo para jugar 20 segundos. Benzema y Hierro se encargaron de tranquilizarle.

Su progresión parecía no tener límite. Se hablaba de selección para un futuro ganador del Balón de Oro. "El techo de Jesé es ese galardón", decía De la Red, que añadía que el jugador canario no había mostrado aún todas sus cualidades. Jesé superó el registro goleador de Butragueño en el Castilla, con 22 goles en una sola temporada, uno más que el ahora director de relaciones institucionales del Madrid. A eso unió una gran actuación en el Mundial sub-20 de Turquía, en el que marcó cinco goles. Ese imparable ascenso hizo que el club blanco le ampliase su contrato en julio del 2013 durante cuatro temporadas más. Su cláusula de rescisión es ahora de 200 millones de euros.

DERRIBAR LAS PUERTAS

El camino de Jesé parecía similar al de Pedro en el Barcelona, pese a que el jugador azulgrana tiene cinco años más que el madridista. De cualquier forma estaban llamados a derribar todas las puertas. El jugador del Barcelona despunta más en la selección que en su equipo, mientras que para el madridista todo se truncó el 18 de marzo del 2014 cuando se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha en el encuentro de vuelta de octavos de final de Champions ante el Schalke en el Bernabéu. Ancelotti le echó mucho de menos al final de la pasada temporada cuando el Madrid desperdició sus opciones en la Liga. «Con Jesé, el final del campeonato hubiera sido diferente», dijo el técnico italiano.

Ahora, el discurso de Carletto Carlettoha cambiado. Apenas recurre al jugador canario. Lo ha hecho principalmente cuando Cristiano no ha jugado por sanción. Se dice que Ancelotti no termina de verle bien físicamente, aunque el técnico se ha delatado hace unas semanas cuando ha apuntado que si Bale, Benzema y Cristiano están bien «jugarán siempre». Una frase que se ha grabado en la mente de este cantante de rap, de fuerte carácter que tuvo que ver cómo su casa ardía solo una semana después de su lesión. Ahora, la situación de Jesé vuelve a ser difícil, tanto que no descarta cambiar de aires.

Ancelotti ha hablado con él para calmarle, aunque el italiano no está dispuesto a mover a sus tres hombres de arriba. Por allí, por la izquierda, es donde quiere aparecer Jesé para retomar esas expectativas que ha generado y que ahora vuelven a estar en el aire.