Juan Roig (Mercadona): “Si queremos tomar zumo de naranja en verano, o lo traemos de fuera o no hay”

Mercadona termina un año histórico completamente marcado por el incremento del precio de la alimentación. La cadena ha vendido un 5% más en volumen, ha incrementado sus ingresos un 15% (hasta los 35.500 millones de euros) y ha obtenido 1.000 millones de euros de beneficios que no tienen precedentes dentro de este gigante de la distribución alimentaria y de su sector en general. Este volumen es, de hecho, un 40% mayor al de 2022. Ahora, la cadena valenciana empieza formalmente otro ejercicio de ambición similar, en este caso influido –por lo menos en su arranque– por la revuelta del campo.

Este ha sido uno de los temas centrales en la ronda de preguntas posterior a la presentación de resultados de 2023, este martes. Sobre todo, porque uno de los factores que más molesta en terreno agricultor es que haya tanta diferencia entre el precio al que se compra el producto en el campo y al que se vende en el supermercado. Fiel a su estilo, el presidente y principal dueño de Mercadona, Juan Roig, ha asegurado comprender este malestar.

“Lo que yo digo es que cuando uno compra un coche, no pregunta el precio del hierro, porque ese hierro se transforma en un coche: cuando una sandía está en el campo, no es la misma sandía [que llega al supermercado]”, ha defendido el empresario. “Hay que cogerla, transportarla a un almacén, limpiarla, seleccionarla, transportarla, ponerla en el lineal, venderla y, luego, las que no vendamos, donarlas o tirarlas, todo eso son los costes de la cadena agroalimentaria, que en productos frescos son muy altos”, ha desarrollado.

Mercadona invertirá 5.000 millones de euros en los próximos 5 años

Dicho esto, Roig ha asegurado no hacer abusos de precio y, en relación con otra de las grandes quejas de los agricultores, comprar tres cuartas partes de lo que vende en España o Portugal. “Como filosofía de empresa, queremos comprar donde estamos vendiendo, primero porque socialmente es mucho más responsable, segundo, porque es más barato”, ha apuntado. El problema es la disponibilidad de producto, que ha ejemplificado con la piña (que apenas si se encuentra en el Hierro, en las Islas Canarias) o la naranja. “Si los consumidores queremos tomar zumo de naranja en verano o lo traemos de fuera o no podremos tomarlo”, ha zanjado el empresario. “Si no bebiésemos zumo de naranja durante tres meses en España, no importaríamos naranjas de fuera”, ha lanzado.

De todos modos, del discurso del presidente de Mercadona se desprende que es consciente y coincide con que el campo tiene un problema severo en cuanto a lo que ganan sus empresarios. “Cuando comparo que por un litro de leche le pagamos al agricultor, 60, 70 céntimos o 1 euro, y pagamos por un móvil 1.000 euros…”, ha planteado Roig, que ha dejado claro que encuentra mucho más difícil la elaboración del litro de leche. “El agricultor no va a trabajar si pierde dinero, y ese va a ser un problema de la sociedad occidental”, ha alertado. “La alimentación es un producto que nos hemos habituado a vender muy barata y eso es muy difícil de cambiar”, ha advertido. "Nos estamos jugando la alimentación", ha insistido.

Bajadas de precio y negocios en auge

Su presentación también ha servido para conocer el posicionamiento o situación de Mercadona en muchos otros ámbitos. Por ejemplo, que la empresa ha detectado cierta bajada de precio de las materias primas que, en principio, tendría que traducirse en una bajada del precio del producto final. “Siempre cuesta más bajarlos que subirlos”, ha matizado Roig, refiriéndose sobre todo a los intermediarios. “Pero se están produciendo bajadas”, ha afirmado. En este sentido, el dueño de Mercadona ha destacado el azúcar, el arroz y el aceite de oliva como los productos que más se han disparado en 2023 y que siguen en situación parecida en 2024.

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También ha hablado Juan Roig de la oferta, en general. De que están creciendo mucho en el negocio de la comida preparada y que es un área al que ven mucho futuro, aunque todavía no ganen dinero con ella. Que la venta de pescado fresco no está funcionando, un fenómeno que relacionan con la situación que vive este mercado en su conjunto (ha caído un 10% en los últimos 4 años) y del que están estudiando las causas, así como fórmulas para sobreponerse. Y, por último, de que la apuesta por la marca Mercadona es absoluta.

Llaman, a esta estrategia que se basa en tirar solo de proveedores si son especializados y si hay una relación de confianza mutua muy bien solidificada, ser “’totaler’ radical”. “Tenemos éxito porque tenemos un gran modelo, porque hemos apostado por decisiones valientes y a veces impopulares y molestas [en referencia al cierre de algunas tiendas por priorizar mejores ubicaciones o locales], pero siempre dentro del modelo, y porque los trabajadores y proveedores tenemos muy claro donde nos dirigimos”, ha compendiado Roig. “El futuro que vemos en el comité de dirección es un futuro espectacular”.