Bocados con marcha

Madrid es una fiesta: estas son las mejores cenas con espectáculo

Los ‘dinner shows’ arrasan en la capital en su mejor versión: gastronomía que da la talla y espectáculo que acompaña, pero no invade

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Pabblo, uno de los nuevos restaurantes en aunar espectáculo y gastronomía

Pabblo, uno de los nuevos restaurantes en aunar espectáculo y gastronomía / Pabblo

Javier Sánchez

Javier Sánchez

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Madrid es audaz, jaranero y curioso”. Así describió la escritora Emilia Pardo Bazán a la capital, dando testimonio de su carácter fiestero. O del carácter de sus gentes, que siempre han sido aficionadas a la diversión y el alterne. Por eso, que ahora abunden los ‘dinner shows’ no debería sorprender a nadie: al fin y al cabo estas fórmulas mixtas de restaurante y espectáculo aúnan dos placeres humanos como son el de comer y el de divertirse.

En los eclécticos 80 ya funcionaba la fórmula de restaurante con espectáculo. En este caso la fórmula más socorrida era disponer mesas alrededor de un escenario, como pasaba en el Florida Park o en el Scala Meliá Castilla. Y si hablamos de antecesores, habría que hablar de los cafés cantantes o tablaos flamencos que amenizaban las noches de Madrid en décadas anteriores.

En los 90 la fórmula mutó y reinaron propuestas como las del Gula Gula (en el edificio Grassy de Gran Vía), abierto en 1996 y que permaneció allí con su ‘show’ protagonizado por ‘drag queens’ y su fórmula de menú cerrado durante casi 20 años. En 2021 reapareció en la calle de Preciados. También en el 1996 abrió La Castafiore, otro enfoque de lo que puede ser un restaurante con ‘show’ en el que a los comensales cenan al compás de las voces de cantantes de ópera y de zarzuela: aún sigue abierto.

Explica el hostelero -es el dueño del más que veterano El Mesón de Fuencarral- y consultor gastronómico Ramón Dios que la actual proliferación de ‘dinner shows’ responde a “una tendencia que llega de Latinoamérica o de ciudades como Miami”. Para él, la clave es la de “ofrecer al comensal un valor añadido en el local en forma de espectáculo, además de invitarle a tomarse la ‘primera’ allí mismo. El restaurante se transforma en local de copas, por así decirlo, y ofrece un todo en uno. Ventajoso para el cliente y también para el negocio, claro”, resume.

Pero no es una fórmula fácil: los ‘dinner shows’ necesitan ser exitosos (casi) desde el principio para sobrevivir. Y aquí no hay atajos. “Los que triunfan lo han conseguido a base de buena gastronomía. Hay que reconocer que en ellos se come francamente bien. Son proyectos complicados de mantener, porque suelen estar ubicados en localizaciones céntricas, lo que implica alquileres caros, y necesitan de mucha plantilla si sumamos cocineros, camareros, artistas…”. Estos son algunos de los que mejor representan esa nueva manera de entender el ocio madrileño.

La decoración de Pabblo incluye guiños a Picasso

La decoración de Pabblo incluye guiños a Picasso / Pabblo

Pabblo

Azca revive y así lo demuestra este proyecto del Grupo Carbón, situado a los pies de la Torre Picasso (plaza de Pablo Ruiz Picasso, 1), y con 2.000 metros cuadrados repartidos en dos plantas. La propuesta gastronómica hace de la nostalgia su 'leit motiv’ con platos que hacen viajar a los comedores de hace algunas décadas, como la ensaladilla-cóctel de langosta o el ‘croque monsieur.’ Buenos cócteles a cargo de una leyenda de la mezcla, Carlos Moreno, y un espectáculo arropado por una banda de música tocando versiones y artistas entre los que encontramos bailarines o acróbatas.


Jimmy's, el nuevo proyecto de Gabana

Jimmy's, el nuevo proyecto de Gabana / Jimmy's

Jimmy’s

La propuesta gastronómica del renacido Club Gabana (María de Molina, 39) tenía que mezclar, sí o sí, buena cocina y espectáculo. El que ha sido durante décadas un referente del ocio nocturno en Madrid renace albergando el restaurante Jimmy’s, que no escatima a la hora de servir lujo: el jamón es de Joselito -uno de los 'vintage' de la marca está en carta- mientras que los vasos de la coctelería han sido diseñados con José Piñero, un referente en la creación de vajillas de impacto. Además, una buena propuesta de bocados japoneses y carnes como el solomillo Macallan redondean el apartado gastronómico. Para amenizar las noches, música en directo y mucho espectáculo que busca sorprender. 


Espectáculo y gastronomía japonesa se dan la mano en SLVJ

Espectáculo y gastronomía japonesa se dan la mano en SLVJ / SLVJ

SLVJ Velázquez

Pioneros del ‘dinner show’, aquí (Velázquez, 62, dentro del Hotel Bless) se mezcla gastronomía con guiños a Japón -que nadie espere purismo, aunque el nivel es alto- y propuestas artísticas propias que hacen referencia precisamente a lo “salvaje”. En la carta, ya asoman como clásicos la coliflor ahumada con puré, los carabineros a la ‘robata’ o el ‘wagyu’ A5 con arroz al ‘wok’, caviar y huevo. También hay ‘brunch’ orientado a familias donde los niños se unen al elenco del equipo de animadores: espectáculo con la cara pintada.


Mamaquilla, sabores (y 'show') con acento latino

Mamaquilla, sabores (y 'show') con acento latino / Mamaquilla

Mamaquilla

Si SLVJ mira a Asia, Mamaquilla (José Abascal, 61) lo hace a América Latina. Joaquín Serrano y Jorge Velasco, artífices también de otros restaurantes exitosos como Varra, elaboran aquí causa limeña, ceviches de distintos pescados como el pargo o los patacones. Coctelería basada en ron, mezcal y tequila. Alrededor de la mesa: baile, música y ritmo latino para acompañar la comida.


Viso94, 'glamour' y gastronomía en la Castellana

Viso94, 'glamour' y gastronomía en la Castellana / Viso94

Viso94

El chef Pablo Fernández (al frente también de NoDrama) es el hombre detrás de la carta de este restaurante que aspira a convertirse en un referente del ocio en el paseo de la Castellana (en el número 94). Más de 1.000 metros cuadrados y un recetario que fusiona elementos de aquí y allá en platos como la croqueta de callos a la madrileña y 'kimchi' o la ostra con leche de tigre y lulo. En el espectáculo, más fusión: noches mexicanas, árabes, cubanas… obra de la directora artística Mey Green.