Ernest Maragall anuncia por sorpresa que abandonará de inmediato el Ayuntamiento de Barcelona

El presidente del grupo de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, ha anunciado por sorpresa este viernes que abandonará el consistorio de forma inmediata, es decir, que formalizará su salida del consistorio en diciembre: "El próximo plenario será el último en el que participaré".

Maragall no se ha extendido al explicar su decisión, ha afirmado que es una decisión “personal, tomada a conciencia” y “con una razón de fondo, la de siempre: Barcelona”.

El resultado electoral

El anuncio del todavía concejal llega semanas después de que la número dos del grupo, Elisenda Alamany, afirmara el 10 de noviembre que Maragall debía dejarle paso como nueva jefa de filas de ERC en el consistorio, a la vista de cómo ha ido la vida política de los republicanos en el consistorio. Su salida supondrá la entrada en el grupo de Rosa Suriñach, concejala en el anterior mandato y actual jefa de gabinete de Maragall.

Alamany consideró que había que tomar decisiones tras la pérdida en las municipales del pasado 28 de mayo de cinco de los 10 concejales que el partido tenía en el mandato anterior.

“Es natural y cae por su propio peso, que (Maragall) no estará en el ayuntamiento estos cuatro años, que no seguirá y que las riendas las cogerá la siguiente persona que estaba en la lista, que en este caso soy yo”, dijo aquel viernes Alamany. Ese día, Maragall cogía un vuelo hacia Estados Unidos, para pasar unos días en Baltimore. No contestó a su número dos, y en realidad las declaraciones de la que será nueva presidenta de ERC en el ayuntamiento son el colofón de un proceso que empezó hace meses.

Poco después de que Maragall anunciara su adiós, Alamany le ha dedicado un mensaje de agradecimiento en la red social X.

El alcalde que no fue

Que Maragall no acabaría el mandato 2023-27 era una posibilidad que no acaba de sorprender, si bien como candidato a las municipales afirmó que se quedaría todo el mandato. Su resultado en las municipales no fue bueno y a sus 80 años no se contemplaba la posibilidad de que repitiera como alcaldable.

Con Maragall se retira de la política catalana la familia del que es considerado el mejor alcalde de la historia de Barcelona, Pasqual Maragall. Su hermano Ernest le acompañó como una sombra cuando dirigía la ciudad, y luego fue miembro del Gobierno catalán que presidió.

En 2019, se dio un caso sin precedentes: el hermano de un exalcalde ganó las elecciones y todo apuntaba a que sería alcalde, pero Ada Colau logró reeditar el cargo gracias al apoyo de Manuel Valls y dejó al ganador con la miel en los labios.

La irrupción de Trias

Lejos de hacer pagar la maniobra a la alcaldesa, Maragall convirtió al grupo de ERC en un apoyo estable que permitió a Colau aprobar los cuatro presupuestos, si bien en un caso fue obligado a ello por el partido, para no entorpecer un acuerdo paralelo sobre las cuentas de la Generalitat.

Maragall seguía aparenciendo como un candidato con opciones para 2023, pero la entrada en escena, o el retorno a ella, de Xavier Trias como alcaldable de Junts en sustitución de la dimisionaria Elsa Artadi lo cambió todo. En tanto que las encuestas empezaron a vaticinar un buen resultado de Trias negros nubarrones amenzaron los de ERC.

La oportunidad perdida

El augurio se acabó cumpliendo y posconvergentes y republicanos intercambiaron posiciones: Junts acabó ganando las municipales, con 11 concejales, uno más que ERC cuatro años antes, y los republicanos se quedaron con cinco, los mismos que Artadi logró en 2019.

Al final, la sensación para el partido es más que amarga, porque nada indica que vuelva a tener posibilidades de volver a ganar Barcelona en breve.

Ni alcalde ni primer teniente de alcalde

Con todo, Maragall tuvo en junio la posibilidad de tener protagonismo en el gobierno de la ciudad como socio menor de Trias. El pacto entre Junts y ERC para gobernar juntas Barcelona hasta 2027 ya estaba escrito e iba a presentarse en público el 17 de junio, día en el que se celebró el pleno de investidura.

Pero 49 minutos antes de que empezara la sesión, para estupor de muchos de los asistentes al acto en el Saló de Cent, se supo que Barcelona en Comú iba a dar su apoyo a Jaume Collboni como alcalde, lo que sumado al del PP convirtió al socialista en primer edil. De esta forma, Barcelona en Comú dejó a Maragall sin alcaldía en 2019 y sin la primera tenencia en 2023.

El futuro

El grupo que ahora encabezará Alamany tiene que tomar en las próximas semanas, meses a lo más tardar, la decisión de si entra o no en un supuestro tripartito con el PSC y Barcelona en Comú, en el caso de que esta fórmula sea la elegida por socialistas y Comuns. El debate es claro: qué conviene más, estar dentro de un gobierno como socio menor o mantenerse fuera y ejercer un perfil crítico con la gestión del alcalde.

Alamany dio a entender el pasado 10 de noviembre que la segunda opción le seduce más: “Haremos una oposición diferente de la que hicimos los últimos cuatro años. No regalaremos los votos a nadie. Hemos aprendido la lección. Hay que ser responsable con la ciudad pero la ciudad nos ha dado un mensaje muy claro, que no le gustaba un gobierno del PSC y los Comuns. Nuestra función no es ser la muleta de un gobierno de izquierdas”. Sin embargo, y pese a estas palabras, nada indica por ahora de forma terminante que ERC se cierre en banda ante la posibilidad de un tripartito.

El adiós de Jordi Martí Grau

El adiós de Maragall ha dejado en segundo plano otra salida anunciada este viernes, la del concejal de Barcelona en Comú Jordí Martí Grau, que se ha despedido del consistorio para convertirse en secretario de Estado de Cultura del Gobierno de Pedro Sánchez.