Carta de Tito Álvarez a los taxistas de Barcelona: “He perdido 14 kilos en mes y medio”

El líder de la principal entidad de taxistas del área de Barcelona, Élite Taxi, quiere promover los hábitos saludables en su colectivo a través de su propia lucha contra la obesidad y el sedentarismo. A través de El Periódico, Tito Álvarez se dirige a sus compañeros de profesión con una carta muy personal en la que relata su reciente cambio de vida a través de la dieta y de ejercicio diario.

Y es que una operación gástrica le hizo bajar de peso temporalmente, pero tras unos meses recuperó gran parte de los kilos perdidos. Hoy en cambio logra resultados y satisfacción con sus nuevas rutinas y mucha fuerza de voluntad.

Carta muy personal para taxistas, por Tito Álvarez

Algunos ya sabéis que hace un par de meses que he empezado a hacer deporte, comer bien y tomar complementos nutricionales para cuidarme. Decidí que había llegado el momento de dar un giro radical a mi salud y en un mes y medio he perdido ya 14 kilos; y esto es solo el principio.

 En los últimos años de lucha del taxi no me traté nada bien. Mi carácter explosivo me llevó a ir a tope en todo momento y a que no me importara mucho qué pasará mañana ni con mi salud ni con mi cuerpo ni con mi aspecto. Llegué a pesar 150 quilos, cosa que no me permitía respirar ni dormir bien, no encontraba ropa de mi talla, me sentía incómodo en todas las posiciones, y así un largo etcétera.

Además, está el tema de cómo se trata a la gente obesa: muchos te miran con desprecio silencioso, te tratan con condescendencia como si estuvieras enfermo o fueras inferior a ellos, otros más abusones incluso usan el insulto para hacer mella en la autoestima de uno. Tengo que decir que la parte del aspecto y del qué pensarán los demás me importa menos que a la mayoría de la gente, aunque no puedo decir que no me afecte nada. Pero para mí lo más importante es cómo me sentía a nivel de salud, de comodidad y movilidad, y emocionalmente; ahora con el ejercicio, las digestiones ligeras de comida sana, las sesiones en la naturaleza y de tomar el sol me siento más vital que nunca.

Hace años cuando alcancé el peso de 150 kg me tuvieron que operar del estómago, para reducir su tamaño, ya que mi estado empezaba a ser muy grave. Esta operación tan invasiva hizo que perdiera 50 kg en pocos meses, por lo que sentí que había sido todo un éxito. Ahora me doy cuenta de que fue un error operarme.

La operación no hizo que yo cambiara mis hábitos ni mi trato conmigo mismo, por lo que sufrí un efecto rebote; me fui dejando y poco a poco volví a pesar cerca de 130 kg. Después de estos años de larga y dura lucha por el sector de taxi me he dado cuenta de que hace falta pensar y actuar de forma estratégica, con paciencia, perseverancia, y perspectiva. Sin embargo, aún no había aplicado esto a mi propia vida y a mi salud. Ahora veo que defender lo nuestro también pasa por defenderse a uno mismo.

Este cambio sale en parte de conversaciones con compañeros con quien debato de temas de trabajo y también personales. Con ellas llegué a la conclusión de que para que los cambios sean permanentes deben ser cambios profundos y progresivos, o sea cambios de la propia identidad e integridad, y que no busquen atajos. Actualmente he empezado una dieta casi sin azúcares, menos carbohidratos, menos grasas, sin procesados, sin casi lácticos de vaca ni gluten, con alimentos ecológicos, y con complementos naturales para eliminar tóxicos, parásitos y limpiar el cuerpo como el ajo, el cardo mariano, la bromelina, la alcachofa, la chlorella, etc.

Además, he empezado a hacer ejercicio de forma constante, yendo al gimnasio a hacer pesas dos veces al día y a caminar rápido más de 10 km al día.

Algunos se preguntarán que a qué viene esto. No quiero soltar la chapa con mi vida, pero en los últimos años muchos me han visto como un líder, un referente, me han dado apoyo, me han dicho que se fijan en mí, en mis cualidades, etc. Siempre he defendido que hay que mejorar, que el taxi de Barcelona tiene que ser el mejor del mundo, que tiene que modernizarse, ser de la máxima calidad, que tenemos que ser educados, saber idiomas, digitalizarnos, ser la imagen de la ciudad, pero en realidad muchos taxistas nos hemos descuidado físicamente, por la naturaleza de nuestro trabajo que es de estar sentado muchas horas, y hemos cogido malos hábitos.

Me gustaría que mi actual proceso de cambio dé un buen referente a los taxistas jóvenes que entran en el sector y a las personas que me ven por los medios, en especial los niños/as, quienes tienen que ver que la salud es lo primero y que el taxi es un sector saludable. De hecho, nuestra asamblea aprobó en julio que se creara la sección Elite Joven para taxistas menores de 40 años, quienes podrán proponer cosas en su favor y gozar de algunos beneficios específicos en los que estamos trabajando. Espero también que lo que cuento anime a taxistas más veteranos que están buscando la fuerza para mejorar su salud a que lo hagan.

Por último, me gustaría comprometerme públicamente a bajar de peso por debajo de los 100 kg en los próximos 6 meses. Por otro lado, quiero proponer a los taxistas la organización de una nueva Cursa del Taxi. Os animo a que os entrenéis y que nos veamos las caras entonces (y que mientras tanto luchéis por el sector). Sería muy positivo también que podamos hacer que esta cursa se realice anualmente, como la dels Bombers, la Guardia Urbana o la del Corte Inglés.

Por último, me gustaría tender mi mano a los que no encontráis la motivación para dar el primer paso, yo la encontré sobre todo con una persona que me hizo ver las cosas de otra manera sin ni siquiera saberlo, pero el cambio llegará cuando busquéis dentro de vosotros mismos la motivación personal.  

Vuestro Tito