Mirador sin barreras
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Vistas desde la zona de bar y restaurante de The Rooftop, en la planta 25 del Nobu Barcelona. / JORDI OTIX

Patricia Castán
Patricia CastánPeriodista
Periodista en El Periódico de Catalunya desde 1996. Ha ejercido de redactora y jefa de sección en Gran Barcelona. Especializada en los ámbitos de economía local, comercio, turismo, vivienda, ocio, gastronomía y tendencias urbanas.
Patricia Castán
Decir que es vertiginosa o impresionante es quedarse corto. El universo paralelo que en Barcelona conforman las terrazas de hotel en las alturas acaba de hacer su fichaje más espectacular, a una altura de 25 pisos y reinando sobre la ciudad. The Rooftop en el hotel Nobu Barcelona nace con récord local incluido: es la más alta en un hotel de la capital catalana y con mejores panorámicas. Puede decirse que no hay nada que no quede a la vista (del mar a Montjuïc, el Tibidabo o la Sagrada Família, pasando por un plano imponente del Eixample) pese a ser una joya oculta hasta la fecha, ya que durante décadas estuvo coronada por la gigantesca antena de comunicaciones de la Torre Catalunya.

Imagen de archivo de cuando la Torre Catalunya estaba coronada por una gran antena. / ALBERT BERTRAN
Cabe recordar que el hotel de lujo abrió en septiembre de 2019 en lo que había sido un icono arquitectónico de los años 70, el Gran Hotel Torre Catalunya, a los pies de la plaza de los Països Catalans y junto a la estación de Sants. Se reformó integralmente y levantó gran expectación al suponer el desembarco del sello que abanderan el chef Nobu Matsuhisa, el actor Robert de Niro y el productor Meir Teper, aliados con el grupo Selenta para su aventura barcelonesa. Pero este último vendió el hotel a la gestora de fondos ASG a finales de 2020.

La nueva terraza y sus vistas desde la piscina. / JORDI OTIX
En sus diferentes etapas hoteleras todos los gestores han tenido claro que la azotea era un diamante en bruto. Bastaba con visitar el restaurante japonés de la planta 23 del mismo nombre (antes Visual), para perderse con la vista en el horizonte. No obstante, ese terrado estaba ocupado por una antena monumental, de más de 20 metros y 37 toneladas de peso incluido el chasis, explican, que desde hacía tiempo ya no funcionaba como mecanismo de comunicaciones. Era un descomunal trasto que hubo que desalojar.
Sacar la antena y reinventar
En verano de 2021 se procedió a retirar con ayuda una grúa de grandes dimensiones la que había sido una de las mayores antenas de Catalunya, que entonces se acompañaba de un gran rótulo publicitario. Fue necesario incluso cortar el tráfico. Pero han tenido que pasar casi dos años para completar el proyecto. Ha resultado especialmente complejo porque se ha aprovechado para trasladar a la enorme azotea toda la maquinaria de los equipos de aire acondicionado que estaban en un sótano -4. Ahora quedan ocultos tras la piscina.
El proyecto para la nueva terraza ha llevado dos años, desde la retirada de la antena gigante de la Torre Catalunya hasta la tramitación de permisos y el diseño con elementos japoneses y locales
Tras el laborioso proceso de licencias de obras y para la terraza, que debía resurgir como espacio lúdico de 300 metros cuadrados a la fresca, las obras comenzaron en verano de 2022 y han durado casi un año. El diseño de AvroKo integra elementos de la cultura japonesa marca de la casa, pero también componentes locales. Así, suma un jardín de inspiración nipona como marco visual, revestimiento de azulejos Kawara que recuerdan a tejados tradicionales japoneses en el bar, y otros artesanales de inspiración modernista en la zona de la piscina.

Unos clientes miran el horizonte al atardecer, desde The Rooftop del Nobu. / JORDI OTIX
Nobu Hotel ha querido introducir más guiños a la ciudad que lo alberga, eligiendo, por ejemplo, a la firma barcelonesa Eiko Ai para uniformar a su equipo, a Etnia Barcelona para proveerlo de gafas de sol y a Natura Bissé Barcelona para las cremas de sol.
Coronar la cima
¿Qué se encontrarán los usuarios cuando coronen la cima de la planta 25? Para empezar, sin ser el hotel más alto de la ciudad (80 metros) sí ofrece la terraza descubierta de hotel más elevada de Barcelona, ya que el Arts no cuenta con terraza visitable de altura (solo en sus suites). Los clientes alojados en sus 250 habitaciones del Nobu pueden utilizar todo el día el espacio, con área de solarium y piscina y de bar y restaurante. Y por cuestión de tamaño, el público local accede a partir de las cinco de la tarde, hasta la medianoche, de jueves a sábados. Les costará elegir emplazamiento para contemplar la urbe al atardecer, cuando se redibuja con nuevas sombras.

Rincón desde el que se divisan la Torre Mapfre y la Sagrada Família, entre otros referentes de Barcelona. / JORDI OTIX
La directora de Márketing, Lorna Tumbull, explica que esperan que se convierta en un punto de encuentro icónico. Un referente local. "Es un sitio desde el que se puede mostrar toda la ciudad, único", relata, mostrando cómo se divisan tanto los aviones que se acercan al aeropuerto como los cruceros que atracan.
Desde el pasado jueves, la avenida de Roma muestra las costuras de su reforma a medias, la trama de Cerdà atrapa la mirada, la antigua cárcel modelo ofrece una nueva perspectiva, y los pocos rascacielos de la ciudad (la Torre Mapfre y el Hotel Arts, el Hotel W, la Torre Agbar, los de Diagonal Mar y más) marcan las referencias espaciales. Pero la vista alcanza a la costa, el Maresme, L'Hospitalet. Será el mejor de los miradores para un piromusical.

La zona de bar, con el mar en el horizonte. / JORDI OTIX
Como oferta gastronómica, esas veladas estivales desplegarán una carta de cócteles de autor y clásicos, cerveza artesanal, vinos catalanes y biodinámicos, así como tapas y platos ideales para compartir, que de nuevo fusionan lo asiático y lo mediterráneo, pero se alejan de la propuesta del restaurante Nobu, dos plantas por debajo. La carta, informal, abarca edamames, cecina de wagyu, croquetas de bacalao negro, calamares a la sal, ceviches, onigiris, monakas, sandwiches (hamburguesas, perritos de butifarra, tostadas de jamón ibérico con tomate...) y otros platos y postres.
The Rooftop tendrá también otra vida como espacio para eventos y hasta minibodas. Será difícil que los invitados aparten la vista del horizonte.
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