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Jordi Llauradó dimite como directivo responsable del Espai Barça tras la adjudicación a una empresa turca de las obras del Camp Nou

Jordi Llauradó

Jordi Llauradó / Laura Guerrero

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Jordi Llauradó ha dejado su cargo como directivo responsable del Espai Barça, según ha anunciado el FC Barcelona. Lo hace dos días después de que se conociera la sorprendente adjudicación a la constructora turca Limak Construction de las obras del nuevo Camp Nou. Se da la circunstancia de que Llauradó es el único constructor de la junta directiva y no participó en la reunión del lunes donde se votó la elección de Limak. Tampoco delegó su voto en otro compañero. Ahora Llauradó continuará en la junta y se centrará en la Fundació FC Barcelona. La noticia fue avanzada por 'La Vanguardia'.

En el comunicado del club se subraya que Llauradó ha solicitado dejar su labor en el Espai Barça para "poder dedicar más tiempo a sus compromisos empresariales". "El propio Jordi Llauradó -añade el texto oficial- ha hecho saber al presidente que por razón de estos compromisos no podrá dedicar al Espai Barça el tiempo necesario que un proyecto de esta magnitud requiere".

La dimisión de Llauradó, de 50 años, genera todo tipo de suspicacias al producirse tan solo dos días después de que Limak, en la obra de mayor dimensión que se realizará este año en Barcelona, derrotara la competencia de dos consorcios españoles, muy potentes en el sector: uno formado por Ferrovial, Acciona, Copisa, Sorigué, Copcisa y Rubau, y otro por FCC y Comsa.

Llauradó, socio 19.501 e hijo del exvicepresidente Jaume Llauradó, es socio y senior partner de ACI Capital Partners, fundador y socio de MET Constructora, socio y vicepresidente del Consejo de Administración de Civitas Pacensis y socio y miembro del Consejo de Administración de PHI 4 Technology.

La vicepresidenta y portavoz del club, Elena Fort, explicó el lunes que el directivo “no se encontraba en Barcelona y como es constructor, para evitar suspicacias, no emitió su voto. Lo hizo por ética profesional”.

Garantías de plazo y presupuesto

La constructora Limak Constructions ha garantizado que el equipo podrá volver al estadio antes del 29 de noviembre de 2024, fecha del 125 aniversario del club, y que entregará la obra completa en el verano de 2026, sin superar el límite de gasto de los 900 millones de euros votado por los socios.

Limak Construction es la segunda constructora más importante de Turquía y figura entre las 250 principales del mundo en la lista Engineering News-Record (ENR). Es un semidesconocido grupo familiar turco, presente en negocios muy diversos -desde una cadena de hotel y zumos de fruta hasta cementeras- y que parte del crecimiento de su actividad internacional procede de Rusia, además de estar presente en los países del Golfo Pérsico, los Balcanes, África, Kosovo y Ucrania, donde construyó el metro de Dnipro.

Según explicaba hoy EL PERIÓDICO, ha habido varias claves que han erigido a Limak como ganadora. La más importante: la estrecha relación financiera entre la constructora y el banco de inversión Goldman Sachs, responsable de buscar los 1.500 millones de financiación del nuevo Espai Barça. Una operación que el club azulgrana espera cerrar este primer trimestre. La segunda causa es que Limak se compromete, bajo garantías, a acometer las obras en 18 meses frente a los 36 meses que prometían los aspirantes españoles.

La ética por encima de todo

Junto a Limak se ha presentado la pequeña empresa familiar catalana Vopi4, en la que en el Registro consta entre los accionistas la sociedad Praeter 5 SL, de la que forman parte Eva Liso Barberana y María Victoria Barberana Serrano. La facturación de la empresa, en la que también participan las familias Sabaté y Sánchez, entre otras, es de unos 120 millones de euros.

En una entrevista con este diario en diciembre del 2021, Llauradó establecía la ética en todo el proceso por encima de todas las cosas. "Estoy muy satisfecho de que el presidente Laporta haya dado luz verde a todos los órganos de control, gobierno y ética para garantizar la máxima transparencia", afirmaba. "Todos sabemos lo que vale el hierro, el cemento y la mano de obra", recuerda el directivo, especialista inmobiliario desde que asumiera la dirección de los negocios familiares.