Protocolo del Barça para la censura: votación el 31 y 1 y con urnas dentro y fuera de Catalunya

El coronavirus libró a Josep Maria Bartomeu de pañoladas y pitos en el estadio por la Liga perdida, por la mayor derrota de la historia del club en Europa y por la gestión deportiva que llevó a Leo Messi a intentar dejar el club de su vida. Ahora se aferra a la carta de la pandemia para no convertirse en el primer presidente barcelonista que tiene que dejar el cargo por una moción de censura.

El viernes de la semana pasada Gerard Figueras, Secretari General de l'Esport, decía que en ese momento no había impedimentos para que se pudiera celebrar la consulta. Pero todos los actores de esta historia saben que la evolución de la pandemia cambia a diario el escenario del partido. La Generalitat ha anunciado que este viernes entrarán en vigor nuevas medidas más restrictivas y hace un llamamiento a bajar la actividad social lo máximo posible en las dos próximas semanas. Precisamente el plazo en el que se tendría que celebrar el plebiscito sobre la continuidad del mandatario azulgrana. El Barça presentará en las próximas horas el protocolo para la votación a la Secretaria General de l'Esport, que dará una respuesta después de que se anuncien las restricciones de la Generalitat.

La propuesta azulgrana dispone que la votación se realice en dos días: el 31 de octubre y el 1 de noviembre. A diferencia de las mociones contra Josep Lluís Núñez y Joan Laporta no se votaría solo en el Camp Nou sino que también se habilitarían otros puntos tanto en Catalunya como fuera de Catalunya. En territorio catalán, aparte de en Barcelona (donde se concentran la mayoría de los 110.000 socios), también habrá urnas en las otras tres capitales de provincia y en La Cerdanya y Vic. Y también en otras comunidades con fuerte presencia de socios azulgranas, como Madrid y Andalucía.

El Barça planteará si este protocolo es compatible con las medidas que el Govern tiene previsto anunciar a finales de semana para minimizar el riesgo de contagio. En caso de que desde la Generalitat se diga que es posible la junta directiva haría la convocatoria oficial la semana que viene. Según los estatutos se puede convocar con hasta cinco días de antelación la cita con las urnas, que debería de ser antes del 2 de noviembre.

Desde la Secretaria General de l'Esport mantienen que, como dijo Figueras la semana pasada, a día de hoy se podría hacer. Pero que dependerá del protocolo que se presente y de qué medidas se acaben anunciando el jueves que, en principio, solo afectan a tema de competiciones deportivas (con la suspensión del deporte de ámbito catalán parará durante 15 días), y no afectarían a procesos electorales. "Habrá que ver cómo evoluciona la pandemia", reconocen.

Los promotores de la moción, la tercera pata de la mesa del voto de censura, creen que ante el empeoramiento de los datos de contagio es conveniente hacer el referéndum cuando antes mejor. "Los datos que hay no son muy buenos y razón de más para hacerlo lo antes posible", señala Marc Duch, portavoz de Més que una Moció. De hecho, los críticos con Bartomeu habían planteado que la votación se realizara la semana que viene, el 24 y 25. Sea cuando sea, otra fuente de la moción está convencida de que es imposible que el Govern se oponga a la consulta. "La Generalitat nunca impediría que se celebrara un referéndum".

Sin público ante el Ferencvaros

El PROCICAT de momento ya ha dado por descartado que pueda haber público en el Camp Nou en el estreno de la Champions ante el Ferencvaros. La UEFA permite que haya público en los estadios en sus competiciones, abriendo la puerta a que se produzca la misma situación que en el baloncesto (donde ya se ha dado la paradoja de que la Penya haya podido jugar partidos de la Eurocup en su pista con público pese a tener que jugar a puerta cerrada los de Liga Endesa). La presidenta del CSD, Irene Lozano, mandó la semana pasada una carta al presidente de la UEFA, Alexander Ceferin en la que planteaba que "lo lógico y sensato, en consonancia con lo que ya cumplen los equipos profesionales españoles a nivel nacional, es desalentar fuertemente la apertura de estadios para los aficionados en los partidos de UEFA".

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