Roger Grimau: "Dije que sí antes de que Juan Carlos acabara la frase"

La vida de Roger Grimau dio un vuelco inesperado el pasado lunes a mediodía. Fue cuando Juan Carlos Navarro, secretario técnico de la sección de baloncesto, le llamó para proponerle que se hiciera cargo del primer equipo del Barça después de la ruptura de las negociaciones para la renovación del contrato con Sarunas Jasikevicius.

El tren del primer equipo llamó a su puerta y el excapitán no dudó ni un instante en subirse a él. "A qué puede deberse esta llamada, pensé... ¿Puedes venir al mediodía?, me dijeron. Sí, claro, respondí. Y dije que sí antes de que [Juan Carlos Navarro] acabara la frase", ha explicado en 'Dia B', el programa de Barça TV. En el canal oficial del club, el excapitán ha hecho sus primeras declaraciones como nuevo técnico del Barça. Ante una propuesta así, era evidente que alguien tan culé como él no podía echarse atrás. "Podían pasar más trenes, es una frase hecha, pero este es de los mejores que hay en el mundo. A veces no hay tiempo de subirse porque pasa muy rápido".

Grimau ha tenido que responder lógicamente en Barça TV a la pregunta sobre su falta de experiencia en el baloncesto profesional y lo ha hecho con aplomo. "Cumpliré 45 años en julio y soy culé de toda la vida. Mis padres viven a ocho minutos del Palau. Sé cómo son los culés y cómo son los catalanes. Estoy muy convencido de que irá todo bien. Además me siento arropado y acompañado.Tenía la ambición de ser primer entrenador y por suerte ha sido en el Barça ", ha dicho en alusión a la propuesta de Navarro y de Mario Fernández, el director deportivo. "Dedicaré todas las horas del día y más. Esto es deporte, otros que se dedicarán igual que yo, más seguro que no. Estoy convencido del trabajo que haremos", ha añadido el técnico.

Recién llegado al primer equipo, ya ha puesto sobre la mesa cómo quiere que se mueva el Barça de la temporada 2023-24. "Me gusta jugar alegre y enganchar a la gente. Tengo que ver de qué equipo disponemos, adaptar las piezas y buscar el equilibrio. Esperamos hacer un muy buen basket". También ha tenido palabras de elogio para su antecesor. "Nunca hemos coincidido en el mismo vestuario, lo he admirado como uno de los mejores jugadores de Europa y como entrenador le he tenido cerca, aprendiendo mucho viendo sus entrenamientos. Ha hecho un gran trabajo".

La palabra 'feliz' es la que más ha salido de la boca de Grimau. "Igual la digo seiscientas veces pero es que es así. Estoy superfeliz. Y me sentía de la misma forma en el básquet formativo, que he disfrutado mucho; para mí no era un trabajo".