Margallo, sobre el simposio: "Es lo menos científico que he visto"

Las jornadas históricas más ruidosas de los últimos años han vuelto a provocar este jueves, día de su inauguración, las rotundas críticas del Gobierno. En el Congreso, también los diputados de ERC e ICV han tomado distancias del controvertido simposio 'Espanya contra Catalunya'. Para el jefe de la diplomacia española, José Manuel García-Margallo, la cita, que ha comenzado con la participación del portavoz del Govern, Francesc Homs, no solo puede desplegar perversos efectos sobre la sociedad, sino que también, a su juicio, tiene un nulo rigor académico.

"Es algo extraordinariamente original. El simposio llega a la conclusión desde el mismo título, incluso antes de que haya tenido lugar el debate. Es lo menos científico que he visto", ha señalado Margallo.

De forma paradójica, Joan Tardà, diputado de ERC, ha expresado una objeción similar a la del ministro de Exteriores. "Hubiera sido más inteligente que el título del simposio tuviera una interrogante al final, para que luego los historiadores pudieran sacar sus conclusiones", ha señalado el republicano. Más claro aún ha sido el ecosocialista Joan Coscubiela, que ha tachado el título de la cita de "absolutamente desafortunado en términos históricos, científicos y políticos".

"En un simposio de esa naturaleza, científicamente no se puede prejuzgar desde el título. Y en términos políticos, la historia de relaciones entre España y Catalunya es mucho más compleja. Muchas veces trabajadores españoles y catalanes han luchado juntos contra sus opresores catalanes y españoles. Eso también es historia", ha concluido el diputado de ICV, quien, al igual que Tardà, ha defendido a algunos de los intervinientes en el simposio, como el historiador Josep Fontana.

La denuncia y el conflicto

Las jornadas, que se prolongarán hasta el próximo sábado y han sido llevadas ante la Fiscalía por parte del PPC, UPD y Ciutadans por supuesta "incitación al odio", constan, entre otras, de conferencias como "España y Cataluña, 300 años de conflicto político", "300 años de españolismo en Cataluña", "La economía catalana y el coste de las desigualdades españolas", "La apoteosis del expolio: siglo XXI" y "Contra el alma de un pueblo: la represión cultural".

"Se trata de una flagrante falsificación de la historia, que ayuda muy poco a la convivencia entre algunos catalanes y el resto de españoles. Es exactamente lo contrario que hicimos durante la Transición. Hay que buscar lo que nos une, no lo que nos separa", ha concluido Margallo.

El titular de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha hecho discurrir sus críticas por una vertiente más personal. Las jornadas, ha dicho, le producen una "profunda tristeza", ya que suponen un "retroceso intelectual histórico" y un "engaño" que "enfrenta a todos los españoles entre sí", al buscar el "arrepentimiento" ante una "historia de convivencia, de prosperidad y de libertades, especialmente en los últimos años".