El paro, obstáculo para la conciliación

Los expertos remarcan que las altas tasas de desempleo dificultan las medidas para la racionalización de los horarios

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M. J. / MADRID

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Tras la falta de concreción de la ministra, oposición, sindicatos, patronal y expertos coinciden en que la conciliación debe concretarse en la negociación colectiva, es decir, en los convenios de empresa y sectoriales. Y advierten de que con la mala calidad del empleo que se crea y las altas tasas de paro, la medida tiene problemas de aplicación.

"Con buena educación y atendiendo a la producción", señala Ramón Górriz, secretario de Acción Sindical de CCOO, "se puede conciliar". El problema, enfatiza, es la "cultura retrógrada de presentismo en las empresas" que, en su opinión, existe en España y que lastra cualquier  cambio de mentalidad.

Coincide con Isabel Araque, secretaria de la ejecutiva de UGT, en denunciar que la crisis ha dejado unas jornadas laborales más extensas en las que no se pagan las horas extra, situación que afecta a un  número creciente de trabajadores. De ahí que Araque subraye que sin derogar la reforma laboral es "utópico e incoherente" medidas como las señaladas por la ministra. "Con una jornada de 35 horas se puede reducir los horarios y repartir el empleo", apostilla la dirigente sindical.  

Una medida de este tipo no podría aplicarse por igual a todos los sectores ni a todas las empresas. Para las centrales es indispensable que haya turnos de trabajo para que todos dispongan de tiempo para conciliar, mientras que los empresarios recelan de una medida que les supondría más desembolso económico en contratación y salarios. "Generalizar es difícil  porque las empresas no tienen todas el mismo tamaño",  afirman fuentes de la  patronal CEOE.

CIUDADANOS APLAUDE

Solo Ciudadanos aplaude la idea que pactó la formación con Mariano Rajoy para su investidura. Rafael Simancas (PSOE) lo ve como "un titular fácil y un poco frívolo" ya que en el mercado laboral “predomina el empleo precario y con salarios bajos. Y Alberto Rodríguez (Podemos) explica que "lo que le gustaría a mucha gente de este país es poder estar trabajando a las 18.00 horas".

Con una visión más amplia del problema José Luis Casero, presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles apela a la “prudencia” porque todavía no hay acuerdo. Buena parte de las medidas apuntadas por Rajoy y Báñez están en las conclusiones de esta organización y en las que salieron de una comisión que estudió el tema en el Congreso de los Diputados en la pasada legislatura.

Casero apunta a que el hipotético pacto político del que ha hablado la ministra de Empleo, debe incluir no solo el mundo laboral sino el escolar y de los medios de comunicación.

"Con desempleados en las familias, es difícil la conciliación", afirma Casero, que también considera que una jornada estricta no podría aplicarse a todos los puestos de una empresa. Asimismo esta organización defiende el adelanto del horario de ‘prime time’ en las televisiones. Que el programa más importante de las cadenas comience a las 22.50 horas "afecta tanto al sueño como a la productividad, y también a los chavales, que se pasan bostezando las tres primeras horas" en clase, incide el presidente de la comisión de racionalización de horarios.