La nueva etapa catalana

Ridao renuncia a echar un pulso a Junqueras para evitar otro cisma

Joan Ridao y Joan Tardà, en el Congreso de los Diputados, el pasado mes de septiembre.

Joan Ridao y Joan Tardà, en el Congreso de los Diputados, el pasado mes de septiembre.

JOSE RICO
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Joan Ridao ha decidido garantizar un congreso de ERC más tranquilo que los anteriores y renuncia a participar en la carrera por la sucesión de Joan Puigcercós. El actual secretario general comunicará hoy a sus afines en el territorio que no presentará una candidatura alternativa a la del eurodiputado Oriol Junqueras. Tras constatar que el pacto con este es imposible, Ridao opta por dar un paso atrás para evitar una fractura interna que haga rebrotar las luchas cainitas tantas veces vividas en el seno del partido republicano. La única incógnita que queda por resolver es si repetirá como cabeza de lista en las próximas elecciones generales. A él le gustaría, pero su intención es ponerse a disposición de la ejecutiva que salga del congreso del 1 de octubre, siempre que pueda contar con un equipo de confianza y comparta la estrategia en Madrid de los nuevos dirigentes de Esquerra.

«Nos inclinamos por no plantar batalla por responsabilidad. Mucha gente no lo entendería», señalaron fuentes cercanas a Ridao para justificar la decisión de no impulsar una candidatura propia. Después de varias semanas tanteando los apoyos con los que contaba entre las federaciones territoriales, el todavía número dos republicano ha llegado a la conclusión de que dispondría de fuerza suficiente para articular una lista con serias opciones de competir con la de Junqueras. «Seguro que, en una semana, reuniríamos los avales», afirmaron las mismas fuentes.

VIEJOS FANTASMAS / Pero, precisamente por contar con ese importante respaldo, Ridao entiende que postularse para ser presidente llevaría a ERC a una situación similar a la del 2008, cuando dos de las cuatro candidaturas que se presentaron al congreso estaban auspiciadas por miembros de la ejecutiva. En este caso, y aunque públicamente no se ha pronunciado en este sentido, Puigcercós y su entorno avalan al equipo que Junqueras presentó el pasado sábado. En él hay personas de confianza del aún líder, como Anna Simó, que sería la futura portavoz del partido.

No obstante, el sector de Ridao también reconoce que su movimiento está condicionado por el hecho de no tener asegurado el triunfo en el congreso de otoño. «No nos podríamos permitir un resbalón. Si vamos a la guerra y conseguimos una victoria pírrica, estaríamos igual que hace tres años», apuntaron las citadas fuentes. En el 2008, la candidatura de Puigcercós y Ridao quedó lejos de la holgada diferencia que buscaba respecto a carodistas y críticos, y el congreso se saldó con una cúpula monocolor y un partido cuarteado. Además, el número dos de ERC es consciente de que pesaría demasiado la etiqueta de continuista.

El sector de Ridao ha tratado en los últimos días de llegar a un acuerdo con Junqueras. Pero las diferencias se hicieron muy patentes el pasado viernes, en una reunión entre ambos. El secretario general planteó al eurodiputado la inclusión en su equipo de algunos afines, como el diputado Joan Tardà o el portavoz del partido, Ignasi Llorente. Según el entorno de Ridao, la respuesta de Junqueras fue negativa, alegando que una incorporación de su sector rompería los complejos equilibrios que tuvo que salvar para ganarse elde las otras familias de ERC: los afines a Puigcercós, la federación de Barcelona y el influyente sector tarraconense. Junqueras le aseguró a Ridao que volvería a contactar con él, pero esa llamada no se ha producido, siempre según las citadas fuentes.

GESTOS ELOCUENTES / Y algunos gestos han llevado al secretario general a interpretar que no existe voluntad de acercamiento. El eurodiputado y alcalde de Sant Vicenç dels Horts (Baix Llobregat) presentó su candidatura el sábado, pocas horas después de su última conversación con Ridao. Si quedaba alguna duda, Junqueras, que lleva toda la semana en Estrasburgo, la despejó en una entrevista a EL PERIÓDICO: «Mi candidatura es un proyecto que ya está cerrado», contestó al ser preguntado por un posible pacto con Ridao.

La decisión final implica que el número dos no tomará partido por ninguna candidatura y se centrará en su labor en el Congreso. Tampoco solicitará a la nueva dirección repetir como cabeza de lista en las generales. Esperará a que se lo pidan y, entonces, planteará sus condiciones. Ridao y Junqueras difieren en la estrategia que debe seguir ERC. El secretario general aboga por ampliar el partido por la izquierda y rechazar «frentes patrióticos» con CiU y otras fuerzas independentistas, justo lo que desea el eurodiputado.

Pese a todo, la carrera congresual en Esquerra mantiene a un segundo contendiente: el exsenador Carles Bonet. El exdirigente presentó ayer a su candidata a secretaria general, Roser Cavaller, militante desde 1987. Bonet prometió que, si gana la votación del 17 de septiembre, luchará por recuperar como afiliados a Josep Lluís Carod-Rovira, Joan Carretero y Uriel Bertran.