Pujol compara los recortes públicos con una terapia médica para salvar a Catalunya

El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol ha comparado losrecortes presupuestariosque plantea aplicar el Govern con una terapia médicadelicada para salvarle la vida aCatalunya. En un editorial del boletín electrónico delCentre d'Estudis Jordi Pujol, el exmandatario ha recurrido a su formación médica para formular una comparación entre la crisis que sufre Catalunya y el tratamiento que se le tiene que aplicar.

Según Pujol, el país no padece "apendicitis", enfermedad que es "de diagnóstico relativamente fácil y rápido", con un tratamiento quirúrgico igualmente breve que permite al paciente recuperarse en pocos días.

Catalunya, afirma, "no tiene una crisis puntual que con una intervención rápida y eficaz se puede resolver", sino que padece una "crisis honda, que ha ido progresando" y que "comenzaba a paralizar la caja torácica, es decir, sueconomía, susistema social, sucredibilidad política y financiera, lamoral de la gente".

El mal que padece Catalunya, según el exdirigente, es asimilable al "síndrome de Guillain-Barré", una "polineuritis generalizada, que generalmente comienza por los pies y va subiendo" por todo el cuerpo hasta desconectar el sistema nervioso y los músculos, que quedan paralizados y se atrofian.

La reanimación económica

Pujol ha recordado que este síndrome no se puede curar de un día para otro, sino que requiere de unalarga terapia, "velar al enfermo durante meses y quizá algún año" y los médicos, "cuando llegue el momento más crítico del peligro de asfixia, deberán aplicar bien la técnica de la respiración asistida". "Y después tendrán que establecer un programa largo de recuperación muscular. El enfermo tendrá que volver a aprender a caminar", ha explicado.

Para Pujol, la tarea dereanimación económicadel país que debe afrontar elGovern deArtur Mases similar a la que afrontan los médicos que tratan el síndrome de Guillain-Barré: "Es urgente evitar que la parálisis progrese". "Es urgente evitar que los pulmones se detengan. Es un ejercicio angustioso y fatigoso para médicos, enfermeros y familiares", ha agregado.

Ante las críticas recibidas por Mas y su gestión en sus primeroscien días, Pujol ha recalcado que "a los médicos se les podrá juzgar más adelante". "Ahora tienen otro trabajo. Dramático, profesionalmente difícil, de momento poco agradecido. Pero el que ahora toca hacer. Se les tiene que dejar hacer", ha añadido. "No tiene sentido", en su opinión, querer "pasar cuentas" con el Govern al principio de esta terapia de choque, porque "el enfermo de Guillain-Barré no se curará, ni mejorará ostensiblemente en cien días o en medio año".