Junqueras reclama para ERC la herencia del PSUC de los 70 y el PSC de los 80

Sigue Oriol Junqueras con su tarea pedagógica de explicar a los suyos qué está tratando de hacer con la apertura del partido a los satélites del PSC que han salido despedidos a lo largo de dos años de proceso soberanista. "A lo largo de la historia, en múltiples sitios, fuerzas distintas se han unido para un objetivo, nada abstracto y sí muy concreto", ha aseverado Junqueras este domingo en el acto central de campaña de ERC, en el parque de la estació del Nord de Barcelona.

En ese repaso cronológico, Junqueras ha citado las fuerzas obreras de origen parroquial y la normalización lingüística "que no nació ni en Vic ni en Olot, sino en el barrio de Fondo de Santa Coloma y en Sant Vicenç dels Horts". ERC representa ahora esta suma de fuerzas en lucha por la justicia social, ha dicho el líder de republicano. "Como el PSUC [en los años 70] o las esperanzas de cambio que representó el PSC [en los años 80]".

"Hubo gente que, de buena fe, y provinente de la parroquia de los barrios y del mundo sindical creyeron que en estado federal les facilitaría las herramientas que permitieran mejorar sus barrios. Y los hechos y las decepciones les han hecho ver que esas herramientas solo se las puede dar un Estado" argumentó el republicano. "Y estamos a dos elecciones de ganarlo todo", en referencia alas municipales del próximo domingo y al 27-S.

PROYECTO DE CONFLUENCIA

Así es el independentismo de ERC, un proyecto de confluencia , ha afirmado Junqueras ante Ernest Maragall, Joan Ignasi Elena, Toni Comín y Gemma Sendra, "socialistas soberanistas", como se ha definido el que fuera 'conseller' de Educació. "Nos dirigimos a la mayoría de la sociedad, queremos hacer un partido que se parezca lo máximo posible a nuestra sociedad".

Detalle: Esquerra ha cambiado la música ambiente habitual de campaña (Lluís Llach) por unos 'greatest hits' rumberos. Como en las campaña de Pasqual Maragall. Segundo detalle: antes de empezar el acto se retiraron un par de hileras de sillas. ERC no llenó. Unas 200 personas acudieron a la cita.

EL DISCURSO SOCIAL

Junqueras, insatalado hace meses en el discurso social, mención obligada a sus políticas sociales al frente del ayuntamiento de Sant VIcenç dels Horts incluida, dio paso al alcaldable de Barcelona, Alfred Bosch. En lo que fue una inversión de papeles, el escritor ha trazado un discurso épico, en el que ha tratado de insuflar moral a la tropa independentista: "¿Qué significa que nos estamos desinflando? Cuando alguien diga que está cansado porque ha ido a dos manifestaciones y se ha endosado una camiseta amarilla [en referencia a las vías catalanas] habladle de todos los que dieron su vida para que los catalanes pudiésemos, ahora, conseguir la libertad",  ha clamado.

En la parte del discurso más centrada en la ciudad, antes de acabar con una analogía siempre épica de Alejandro el Grande en las puertas de Babilonia, Bosch ha señalado que quiere "una sola Barcelona, no una ciudad fragmentada entre los que se presentan como los representantes de una parte y los de la otra", en alusión al duelo demoscópico que libran Xavier Trias y Ada Colau.

Y ha finalizado con su coletilla de campaña ya habitual: "El voto a ERC es un triple 'sí'. Sí a la justicia social, Sí a la transparencia, Sí a la libertad de Catalunya."