Berlín acusa a Tsipras de "juego sucio"

Alemania entra en la polémica por las alegaciones de Tsipras contra España y Portugal

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El pique político y diplomático desatado por las acusaciones del primer ministro griego, Alexis Tsipras, de que los gobiernos conservadores de España y Portugal querían derribarle aún ha dado este lunes algunos coletazos. El Gobierno alemán ha entrado en la polémica y ha calificado de «juego sucio» las afirmaciones del mandatario griego.

«Lo que ha ocurrido este fin de semana en Atenas, con comentarios respecto a España y Portugal, fue un juego sucio muy poco usual para los parámetros europeos», declaró ayer el portavoz del Ministerio de Finanzas alemán, Martin Jäger, en una comparecencia ante la prensa. «Esto en el Eurogrupo no se hace; no deberíamos meternos en los asuntos de los gobiernos de nuestros socios», añadió.

RECONOCIMIENTO

Jäger salió en defensa de España y Portugal al tiempo que reiteró «el gran reconocimiento» de Alemania por lo que estos dos países han logrado con sus reformas en los últimos años».

La Comisión Europea, por su parte, evitó echar más leña al fuego e hizo un llamamiento a la unidad. La portavoz del Ejecutivo comunitario, Mina Andreeva, rehusó comentar las acusaciones de Tsipras, aunque confirmó haber recibido las quejas de las autoridades españolas y portuguesas. «Estamos en contacto estrecho con todas las partes implicadas pero subrayamos el papel de la Comisión como mediadora, con el fin de que haya unidad entre los países de la Unión Europea y en particular los de la zona euro», afirmó. «Tenemos que centrarnos ahora en lo que realmente importa y más importante que cualquier comentario es que se hagan las reformas comprometidas por el Gobierno griego», añadió.

Por su parte, el primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, aseguró que haber sido «exigente» con Grecia no implica el deseo de «tumbar» al Gobierno de ese país, como afirmó Tsipras. «Ser exigente con Grecia, como con otros ejecutivos de la UE, no puede ser considerado como una tentativa de tumbar gobiernos o de conspirar contra gobiernos», afirmó.

En Madrid, el vicesecretario de organización del PP, Carlos Floriano, acusó ayer al PSOE de «deslealtad» por no haber salido al paso de las afirmaciones de Tsipras.