Rowling ayuda a escribir la historia de Madeleine

Ella,JK Rowling,es una de las escritoras más queridas por una legión de seguidores en todo el mundo que han crecido al mismo ritmo que su héroe. Ellos,Kate yGerry McCann,son los padres de una niña que, como en los cuentos macabros, de-

sapareció un día sin dejar rastro. Ahora, la mujer que tejió palabra a palabra el universo mágico de Harry Potter ha ayudado a la madre de la pequeñaMadeleine McCann a escribir un libro sobre aquella desaparición.Rowling ha dado consejo aKatepara relatar las circunstancias que rodearon aquellas aciagas vacaciones familiares del 2007 en el Algarve portugués.

La escritora ha venido respaldando a losMcCanndesde que perdieron a su hija. CuandoMadeleinede-

sapareció,Rowlingconsiguió que la foto de la niña se distribuyera en las librerías de todo el planeta, donde se vendían los relatos de Harry Potter. Y cuando losMcCannpensaron en escribir el libro, les puso en contacto con su agente literario y logró un contrato editorial para ellos.Rowlingtambién entregó una aportación de 230.000 euros al fondo destinado a buscar aMadeleine.

Ahora, cuando se cumplen cuatro años del suceso, los padres siguen luchando, pero ese fondo se agota. El libro, tituladoMadeleine: la desaparición de nuestra hija y su continua búsqueda, saldrá a la venta el 12 de mayo, el día en que la víctima cumpliría ocho años. Los beneficios que se obtengan con las ventas se destinarán a seguir tratando de saber dónde se halla. «Cada penique se empleará en eso», aseguraKate McCann,que espera recaudar más de un millón de euros con esta obra. Tal cantidad permitirá que un equipo de detectives privados continúe trabajando durante otros dos años más en las pistas para dar con la menor.

«CONTAR LA VERDAD» / «Quiero contar la verdad, así de sencillo», declara la madre, que al igual que su marido, médico como ella, terminaron convirtiéndose en sospechosos para la policía portuguesa, con la que ahora quieren saldar algunas cuentas. La decisión de publicar su versión de la historia les costó mucho tomarla, reconoce la autora, «pero nada es más importante para nosotros como encontrar a nuestra pequeña».