MUERTE MISTERIOSA

Hallado momificado un alemán desaparecido hace un año en Filipinas

Un grupo de pescadores ha localizado medio hundido el barco en el que navegaba Manfred Fritz Bajorat

Un policía inspecciona el interior del barco, en el que se aprecia el cadáver de Bajorat.

Un policía inspecciona el interior del barco, en el que se aprecia el cadáver de Bajorat. / BM JG CD**TOK**

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El ciudadano alemán Manfred Fritz Bajorat, de 59 años, desapareció hace más de un año mientras navegaba a bordo de su velero por aguas del mar de Filipinas. Este lunes, unos pescadores han localizado el barco a la deriva, a un centenar de kilómetros de Barobo, y dentro se han topado con una sorpresa: Bajorat momificado. La policía filipina ha abierto una investigación para aclarar las causas de la muerte del navegante, aunque todo apunta que falleció de forma natural ya que no se han encontrado signos de violencia.

"Todavía es un misterio", ha afirmado Mark Navales, portavoz de la policía de <strong>Barobo</strong>, en la isla de <strong>Mindanao</strong>. Navales ha admitido que nada hace pensar que tras la muerte del alemán haya la actuación de un agresor. 

Los marineros han encontrado a Bajorat sentado sobre una mesa, con la cabeza reposando sobre su brazo, "como si durmiera". Junto a su mano, el transmisor de radio. El ambiente seco y el aire salado del mar explican que el cadáver haya quedado convertido en una momia.

Entre las pertenencias del fallecido, la policía no ha encontrado la cartera, pero sí documentación y fotos que han permitido identificar el cadáver, así como otros objetos valiosos como la radio o el GPS del barco.

VIDA DE NAVEGANTE

El hallazgo del cadáver pone fin a la vida de aventura que había elegido Bajorat. Según 'The Independent', el hombre inició una vuelta al mundo hace 20 años con su esposa Claudia. El matrimonio no superó los viajes y la convivencia y rompió en el 2008. Dos años más tarde, Claudia murió de cáncer en la isla de Martinica. Bajorat la recordó afirmando: "Treinta años juntos en el mismo camino. Luego el poder de los demonios fue más fuerte que la voluntad de vivir".

Desde la ruptura, el navegante continuó sus viajes en solitario, entre Europa y el Pacífico. Según los medios alemanes, Bajorat eligió este modo de vida huyendo de los crudos inviernos de su país.