CRISIS DE SEGURIDAD EN EL PAÍS SUDAMERICANO

Otro atentado dispara la inquietud en Chile

El Gobierno todavía no conoce la ideología de los autores de los ataques con bomba

ABEL GILBERT
BUENOS AIRES

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El estallido de una bomba tan casera como rudimentaria en un supermercado de la localidad balnearia de Viña del Mar, a 125 kilómetros de Santiago, dejó ayer a una persona herida y acentuó la ola de inquietud que atraviesa Chile por una serie de atentados cuyo origen político resulta todavía desconocido para las autoridades.

Aunque el país está lejos de enfrentar una situación de psicosis social, alentada desde ciertos medios, la explosión en Viña del Mar, sumada al bombazo que el pasado lunes provocó 14 heridos en el metro de Santiago, han obligado al Gobierno de la presidenta, Michelle Bachelet, a cambiar su agenda política y centrar sus esfuerzos en la resolución del gran enigma: ¿Quiénes son los autores de estas acciones?

Desde el 2005, con el primer Gobierno de Michelle Bachelet, hasta a esta semana han explotado unas 200 bombas. Cinco años atrás, un joven de filiación anarquista falleció cuando el artefacto le explotó entre las manos. Lo iba a colocar en las inmediaciones de la Escuela de Gendarmería. Hasta ayer, la principal hipótesis de los investigadores apuntaba a grupos de esa orientación.

DENUNCIA ESTUDIANTIL / Pero las conjeturas exceden a esas pequeñas facciones juveniles. El principal dirigente del Partido por la Democracia (PPD), Jaime Quintana, uno de los pilares de la actual coalición de Gobierno, reconoció que, a estas alturas, no se descarta que «exista una reactivación de exagentes» del régimen militar de Augusto Pinochet interesados en sembrar el pánico.

Mientras tanto, dirigentes estudiantiles decidieron denunciar al Canal 13 no solo por  su sensacionalismo si no sobre todo por vincular al poderoso movimiento universitario con los bombazos.