Los diseñadores de impresión 3D en la moda, los controladores de tráfico con drones y los consultores ambientales son el porvenir
Por: L. Martín
Con la llegada de septiembre empieza también un nuevo curso escolar. Los estudiantes preparan sus estuches con todo lo necesario para atender en las clases que les abrirán las puertas del futuro laboral. Aunque, las expectativas que tienen estos jóvenes distan mucho de las que tenían anteriores generaciones con la llegada de la digitalización y la transición energética, potenciados tras la pandemia del coronavirus. “El concepto de que una vida equivale a un puesto de trabajo y en una única empresa está ya cambiando y lo hará todavía más”, indica el informe ‘Trabajar en 2033’ de la firma PwC. De hecho, la media de puestos de trabajo que se tendrán durante la vida profesional es entre siete y 10,5. Y, en la era de la innovación, también están apareciendo nuevas profesiones.
La mayoría de puestos de trabajo que van a impulsar la economía en 2030 actualmente no existen y serán ocupados por el 65% de menores que están actualmente en la educación primaria, según revela un estudio de la Universidad Europea de Madrid. “Muchas profesiones que aparecerán todavía no se conocen, pero la tecnología va a estar presente en todas ellas”, señala Francesc Calabia, director general de Nuclio Digital School. Estos puestos vendrán de sectores emergentes o de la transformación de los tradicionales en proyectos de alto valor añadido. Así, por ejemplo, buena parte se moverán en el terreno de la robotización, la Inteligencia Artificial, la visión 3D, el ‘machine learning’ o el ‘blockchain’. Además, los perfiles con mayor demanda serán aquellos que sepan “cómo aplicar la tecnología en su entorno de trabajo, y que destaquen por habilidades blandas, como la flexibilidad, el trabajo en equipo, la comunicación o la creatividad”, añade Calabia.
Una de las tecnologías que más se está expandiendo es la basada en cadenas de bloques llamada ‘blockchain’, que está llegando a múltiples sectores a la vez que multiplica sus utilidades. España destaca a nivel mundial por ser el estado con el incremento más grande en la demanda profesional de especialistas en esta tecnología. Concretamente, el país experimentó en 2021 un crecimiento del 609%, de acuerdo con un informe elaborado por LinkedIn y la plataforma de compraventa de criptomonedas OKX. También van ganando protagonismo los especialistas en Inteligencia Artificial. Para la innovación en este campo, España ha creado el proyecto Quantum Spain con una inversión de 60 millones de euros -financiado al 100% por los fondos europeos Next Generation a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial-. Con éste, se pretende crear el primer ecosistema de computación cuántica en el sur de Europa con la adquisición e instalación de un ordenador cuántico en el Barcelona Supercomputing Center, así como la creación de empleo de calidad y la retención de talento en todo el país.
Sin embargo, quedan profesiones por crearse por su complejidad tecnológica. Se vislumbran para los próximos años diseñadores de impresión 3D en la moda, controladores de tráfico con drones, analistas de autotransporte, especialistas en creación de avatares o terapeutas y cirujanos para el aumento de la memoria. Para poder entrar en estos mercados, el director general de Nuclio Digital School indica que es importante que “se desarrollen habilidades que permitan aprender rápido, resolver problemas y trabajar en equipo, lo que se puede hacer a través de la programación en entornos virtuales preparados como Roblox, MInecraft o Scratch”.
Agricultura ecológica y ecoemprendimiento
Las nuevas oportunidades emergen también en el ámbito de la economía verde. La Fundación Ellen MacArthur, el Foro Económico Mundial, la Comisión Europea y la Agencia Europea de Medio Ambiente contabilizan entre 700.000 y un millón de empleos relacionados con la economía verde en la próxima década. Y, de estos, 52.000 estarán en España. “La sostenibilidad va a ser una de las prioridades de los gobiernos en todo el mundo y se va a potenciar en todos los sectores, lo que provocará la necesidad de contratar perfiles que se dediquen a hacer los negocios de las empresas más sostenibles con su entorno”, añade Calabia. La agricultura ecológica, la consultoría ambiental, el ecodiseño de envases, la prevención y el control de la contaminación, el ecoemprendimiento o la rehabilitación energética de edificios se verán fuertemente demandados.
La transición a una economía verde tendrá un alto coste en términos laborales, hará que se pierdan aproximadamente seis millones de puestos de trabajo. Pero a la vez, va a permitir la creación de unos 24 millones de nuevos empleos en todo el mundo, en profesiones vinculadas a la sostenibilidad y el medio ambiente. Es decir, por cada empleo que se pierda, se crearán cuatro nuevos, según la Organización Internacional del Trabajo. Para ello, será clave en España el empuje de al menos el 30% de los fondos Next Generation EU, que irán hacia la lucha contra el cambio climático y el apoyo de proyectos ecológicos.