00%
Cargando

Consumo de proximidad y ecológico: productos 5 estrellas

keyboard_arrow_down
Consumo de proximidad y ecológico: productos 5 estrellas

La calidad de los alimentos producidos localmente, sin pesticidas ni aditivos químicos y en su punto de maduración es indiscutible. Si además la huella de carbono es menor y su precio es más asequible, las ventajas para el consumidor son evidentes. Hablamos con dos productores, premiados por BBVA por sus prácticas sostenibles.

Por: N. Bonet

Cada vez se habla más de la calidad de los productos de proximidad y de la agricultura ecológica, así como de su apuesta decidida por un futuro verde y sostenible. Y es que sus ventajas son muchas respecto al producto industrializado y globalizado que la mayoría de veces no tiene en cuenta factores esenciales como el tiempo de maduración, el excesivo uso de pesticidas o el consumo de hidrocarburos para su transporte.

Los consumidores se inclinan cada vez más por estos alimentos frescos, de temporada, con una trazabilidad fácil de seguir y con todas las garantías de calidad. Son productos más saludables y naturales, puesto que cuentan con menos aplicaciones de productos químicos o artificiales para su conservación, con lo que se logra un sabor más intenso que recuerda a los productos ‘de antes’. Son productos cinco estrellas que, contra lo que pueda parecer, no suponen un mayor gasto para los consumidores.

Por ello, los agricultores y pequeños y medianos productores están apostando por sistemas de producción más eficientes energéticamente, con menor huella de carbono y teniendo en cuenta el equilibrio de su entorno natural. Para impulsar esta transición ecológica, existen ayudas como el PERTE agroalimentario aprobado por el Gobierno, que destinará parte de los fondos europeos Next Generation a mejorar la sostenibilidad, trazabilidad y seguridad de la producción, con 1.800 millones de euros.

Estas ayudas se podrán solicitar y tramitar a través de entidades bancarias como BBVA.

POMONA FRUITS

Abejas y asnos en armonía con el cultivo de manzanas

Pomona Fruits.


“Los productos cultivados de forma ecológica conservan mejor su sabor debido a que se han respetado los ciclos de crecimiento que la planta necesita para completar su maduración, aportando al producto calidad en nutrientes y sabor”. Así de claro lo resume Gemma Llanes, cofundadora de Pomona Fruits, una empresa familiar de Lleida con el bagaje de tres generaciones dedicadas a la agricultura y especializada en el cultivo de manzanas y peras ecológicas.

Abejas para polinizar de forma natural (hasta 8 millones de ejemplares) y asnos para desbrozar los campos de cultivo contribuyen no solo a producir de forma ecológica, sino también a garantizar la biodiversidad. “Cuidamos nuestras tierras de forma respetuosa”, resume Llanes, y lo hacen evitando también los fitosanitarios y los productos químicos, lo que reduce la contaminación de la tierra, el aire y el agua.

Pomona Fruits, que fue premiada en el 2020 como uno de los Mejores Productores Sostenibles por parte de BBVA, avanza ahora hacia una agricultura biodinámica, es decir, aquella basada en una “aproximación holística, ecológica y ética” a la alimentación y los cultivos. “Consideramos nuestra finca como un organismo en el que las plantas, los animales y los seres humanos viven en armonía”, añade.

Pomona Fruits.


Gemma Llanes invita a un consumo responsable, basado no solo en comprar un producto de proximidad sino también ecológico y de temporada. Con ello no solo se logra proteger a las personas del territorio, sino también al medioambiente, generando un impacto positivo en el entorno. ¿Y esto supone un precio más elevado? Gemma Llanes es rotunda: “Los alimentos ecológicos no son caros, es una falsa creencia”.

En este sentido, asegura que el problema es que “el producto convencional es muy barato porque existen una serie de costes medioambientales que no se imputan al producto”. La agricultura ecológica tiene algunos costes más elevados y, a veces, la productividad puede ser menor. Pero, como siempre, se trata de ponerlo todo en perspectiva: “1 kilo de manzanas ecológicas no llega a los 3 o 4 euros; un paquete de bollería industrial es más caro”. Y mucho menos sano, además.

RIET VELL

Arroz ecológico para preservar un paraje natural

Riet Vell.


“La producción de alimentos es una de las actividades que más impactan en el estado del planeta”, afirma Juan Carlos Cirera, director de Riet Vell, empresa dedicada al cultivo de arroz ecológico en pleno paraje natural del Delta del Ebro, así como de pasta de trigo y legumbres. Sus campos de producción son un verdadero oasis donde avistar aves y disfrutar del paisaje autóctono. “Elegir para nuestra alimentación productos más sostenibles, ecológicos y de proximidad podría llegar a suponer un importante cambio en la actual deriva ambiental y social en la que estamos inmersos”, defiende.

Creada en el 2001 por la ONG SEO/BirdLife, en su constitución se implicaron cerca de 200 personas y otras entidades ambientales y, en el 2021, recibió el Premio a los Mejores Productores Sostenibles, otorgado por BBVA. ¿Y qué hace tan especial esta modalidad de cultivo del arroz? “En la finca tenemos 42 hectáreas de arrozal ecológico en las que se ha eliminado por completo el uso de productos procedentes de síntesis química en todas las fases, desde la preparación de las tierras para el cultivo hasta el envasado para su venta al consumidor, cosa que beneficia al medioambiente y la biodiversidad”.

En este sentido, Juan Carlos Cirera recuerda que el cultivo de arroz en su modalidad convencional requiere de gran cantidad de productos fitosanitarios (herbicidas, insecticidas, fungicidas, fertilizantes,…). Aclara que “estos productos, aunque han reducido mucho su toxicidad en los últimos años, tienen efectos sobre el ecosistema y sobre la calidad del medio”, y es por ello que pide unos minutos de reflexión a los consumidores: “Los efectos del cambio climático están ya aquí y en la medida en que todos y cada uno de nosotros desde nuestra posición comencemos a actuar, podremos aspirar a revertir esta situación”.

Riet Vell.


Sin embargo, el cultivo ecológico del arroz no solo tiene un impacto positivo sobre el medioambiente, sino también en uno más visible y directo: el sabor. Se trata de un arroz de grano redondo de calidad, de la variedad autóctona guara, que es ideal para elaborar todo tipo de paellas y risottos, ya que es rico en almidón. “Gracias a ello, tiene una gran capacidad para absorber aromas y sabores”, aseguran desde Riet Vell, que también lo aconsejan para elaborar postres como el arroz con leche.

Con estos argumentos, Riet Vell quiere seguir avanzando incrementando todavía más la sostenibilidad del proyecto, “mejorando las técnicas de producción de arroz, reduciendo las emisiones de CO2 y de metano propias del cultivo, instalando placas de energía solar y mejorando la eficiencia en el uso del agua”. Todo ello para poder disfrutar de un buen arroz del Delta que, además, tiene un impacto muy positivo sobre el planeta.