Unzúe y su reflexión sobre la muerte: "Estoy del lado de la eutanasia si llega el caso, pero lo que queremos es vivir dignamente"

Tras estrenar la cuarta temporada con una peculiar 'road movie' con Estopa, interrogar a Macarena Olona y viajar a Roma junto a Maruja Torres, le ha tocado el turno de ser entrevistado por Jordi Évole a Juan Carlos Unzúe, exportero de, entre otros equipos, el FC Barcelona, y posteriormente reconvertido en entrenador hasta que la enfermedad de la ELA se le cruzó por el camino.

Para ello, Évole ha contado con una suerte de compañeros/comensales que no han querido perderse la oportunidad de charlar alrededor de la mesa del comedor de la casa de Unzué, como ha sido el caso de su excompañero bajo los palos en el FC Barcelona Andoni Zubizarreta, de la periodista deportiva Olga Viza y del actor y cómico Dani Rovira, que recientemente ha superado un cáncer.

Afortunado a pesar de la ELA

El guardameta afronta esta cruel enfermedad neurodegenerativa con coraje y determinación y, siempre con un mensaje optimista como el que nos dejó en su charla para El Periódico.

En el programa de La Sexta, Unzué ha querido reincidir en este mensaje: “Si no tuviera ELA no estaría recibiendo tanto cariño. Al menos ahora tengo la oportunidad de visibilizar la enfermedad”, ha explicado.

Aun así, ante la pregunta de vislumbrar una muerte próxima, no se ha andado con ambages: "Estoy con el derecho a la eutanasia, en depende en qué situaciones facilita, y si llega el caso de que esto no merece la pena... Pues no te sabría decir que no. Pero en lo que sí coincidimos todos los afectados por la ELA es que lo que queremos es vivir dignamente".

María Elorza: "No soy su cuidadora. Soy su mujer"

"Me molesta que me digan que soy su cuidadora porque yo lo que hago lo hago porque le quiero y me gusta hacerlo. No me cuesta nada y no me veo como una cuidadora", ha explicado María Elorza, la esposa de Juan Carlos Unzué y madre de sus tres hijos, que se ha dedicado estos últimos años en cuerpo y alma al cuidado de su marido.

"No pienso en el futuro. Estoy viviendo el presente y aprovechando", ha detallado, ya que considera que la enfermedad de Unzué le ha servido para reforzar la relación sentimental de ambos.

Unzué ha expresado su admiración hacía su pareja con la que lleva 34 años de casado: "No la puedo querer más, no voy a ser capaz de devolverle todo lo que me está dando" aunque en el almuerzo colectivo ha querido hacer un confesión a los presentes de la que su mujer no tenía constancia: "Yo tengo la sensación de que me he convertido en su cuarto hijo".

El fútbol, media vida

Unzué ha confesado que él, en principio, no quería ser portero de fútbol sino que fue algo casi impuesto: "Fui portero por ser el hermano pequeño de seis y, claro, mis hermanos me daban ese único rol" que era el de molestar lo menos posible en un partido colocándome bajo los palos. Una profesión que han heredado dos de sus hijos y que él vive con felicidad por ello.

No obstante, no ha querido olvidarse de los momentos más amargos en su vida profesional: "Yo sufrí mucho en los dos años que estuve en el banquillo del FC Barcelona", una época en la que apenas pudo hacer sombra al portero titular, Andoni Zubizarreta.

"Decidí salir del Barça de Johan Cruyff porque no podía ver el Estudio Estadio, me dolía no verme allí". Aun así, ambos protagonistas bajo los palos del FC Barcelona se confesan un cariño mutuo y durante la charla no han dejado de contar anécdotas divertidas de esos tiempos, como la ocasión en que Cruyff mandó al banquillo a 'Zubi', que con jocosa ironía ha explicado que era reconocido por su 'talento' parando penaltis, para que se encargase de ese cometido Unzué, que lo hizo aprobando con nota... pero que no le sirvió para cambiar su rol y su destino en el club azulgrana.

Un fútbol que les ha traído el éxito, pero que luego les ha ido haciendo bajar de la nube, tal y como ha contado Zubizarreta: "Antes siempre tenían un huequito para mí en cualquier restaurante que estuviera lleno, y ahora si está lleno te dicen que ya está lleno".

Admiración por Maradona

Unzué no se ha andado con rodeos explicando el año que compartió vestuario con el astro argentino Diego Armando Maradona en el Sevilla FC. "Maradona fue espectacular, muy cercano. Al siguiente día se sabía el nombre de todo el staff, incluso el del jardinero, y lo llamaba por su nombre".

"Era muy generoso. Y si nos juntábamos en su habitación los 16 convocados para un partido preguntándole absolutamente de todo, el nos decía: 'Que sepáis que os cuento esto porque os tengo cariño. Y yo sé que me he equivocado y no quiero que vosotros os equivoquéis'", ha explicado.