Aura Garrido y Jean Reno, unos Sherlock y Watson en la España de los años 40

Si el Londres victoriano tenía al infalible Sherlock Holmes y a su inseparable Watson, el de los 30 al puntilloso Poirot y la campiña inglesa a la sagaz miss Marple, la España de posguerra también tendrá ahora a su pareja de avispados investigadores en 'Un asunto privado', la serie que la productora Bambú ('Velvet', 'Las chicas del cable', 'El corredor de la muerte') y Amazon Prime Video están rodando estos días en Galicia. Protagonizada por Aura Garrido y Jean Reno y ambientada en los años 40, la ficción creada por Teresa Fernández Valdés, Ramón Campos y Gema R. Neira (que ya experimentaron con el misterio de época en 'Alta mar') es una mezcla de géneros como el misterio, la aventura y la comedia.

"Queríamos recuperar el 'thriller' clásico de Agatha Christie o de Sherlock Holmes, poniéndole humor y acción", destaca Fernández Valdés desde el rodaje en Vigo, sentada en el comedor de la familia Quiroga, sobre la que gira la trama. Marina (Garrido), la hija del clan, es una joven "intrépida y carismática" descendiente de una generación de grandes policías, una tradición que ella pretende continuar. Pero se enfrenta a los prejuicios de la época, que no aprueban que una mujer ande con pistolas e investigaciones. "Marina es una mujer muy especial, adelantada a su tiempo, que va detrás de su vocación y se opone a la sociedad que la rodea con tal de conseguir su sueño", explica Garrido. El único que confiaba en sus dotes detectivescos era su padre, ya fallecido, que le enseñó todo lo que sabe de ese mundillo.

El estallido de una ola de crímenes de prostitutas en Vigo le hará decidirse finalmente a investigar por su cuenta y riesgo. Aunque contará con un fiel aliado, Héctor (Reno), el mayordomo de la familia. "Tratando de protegerla se verá arrastrado con ella a correr, pegar tiros y buscar a un asesino", adelanta el actor francés, hijo de andaluces, sobre la que será su primera serie española.

Ángela Molina y Álex García

En sus pesquisas también se verán involucrados el inspector Zarco (Gorka Otxoa), al que Marina "enreda para ir en busca de aventuras saltándose muchas veces la ley", según el actor, y Castaño (Álex García), otro policía "con aura misteriosa". Los más contrarios a que Marina se vea involucrada en el caso de los asesinatos serán su hermano (Pablo Molinero), recién nombrado comisario, y su madre, doña Asunción (Ángela Molina), preocupada por casarla. "Sé que tiene un don, pero trato de acercarla al hogar", recalca la reciente ganadora del Goya honorífico.

Toda esta primera temporada girará acerca del mismo caso, bautizado como el del asesino de la flor de lis, ya que el criminal deja grabada en el pecho de sus víctimas esa imagen. El misterio quedará resuelto al final de los ocho episodios, aunque la serie nace con la vocación de resolver más asesinatos en futuras temporadas.