Caso Sancho

Bang Kwang: así es la peligrosa cárcel en la que puede acabar Daniel Sancho

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Entrada de la prisión Bang Kwang en Bangkok (Tailandia).

Entrada de la prisión Bang Kwang en Bangkok (Tailandia). / El Periódico

Iker Sánchez

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Daniel Sancho se encuentra inmerso en el juicio por el presunto asesinato y descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta. La Fiscalía ha acusado al español de asesinato premeditado, ocultación del cadáver y destrucción de la documentación de la víctima.

En el transcurso de las dos primeras semanas de vistas, el acusado solo ha admitido haber desmembrado el cuerpo de Arrieta y haber intentado ocultarlo. Sin embargo, se declara no culpable de los otros dos delitos. Sancho mantiene su versión de que la muerte de la víctima fue accidental, resultado de una pelea entre ambos.

El hijo de Rodolfo Sancho se enfrenta a la pena máxima: la pena de muerte. De eludir esta vía, otras opciones que tiene serían la cadena perpetua o condenas inferiores por homicidio imprudente.

Cuando se obtenga la sentencia final, Daniel Sancho podría ser trasladado de centro penitenciario. Si el español, acusado de asesinar y descuartizar al médico colombiano Edwin Arrieta fuese declarado culpable, podría ser trasladado a Bang Kwang, más conocida como el 'Hilton' o 'El gran tigre'.

Una cárcel muy peligrosa

Sancho se encuentra desde agosto en la cárcel de Koh Samui, una de las más tranquilas del país, en el módulo hospitalario en el que residen los reclusos enfermos o extranjeros a la espera de juicio. Sin embargo, esta estancia podría acabarse si el juez condena a Sancho, en cuyo caso el español podría ser trasladado a la cárcel de Bang Kwang.

La prisión de Bang Kwang, también conocida como 'El Hilton', está situada en Bangkok y es una de las prisiones más problemáticas y peligrosas de Tailandia. Allí cumplen condena los presos más peligrosos del país, como violadores, pederastas, narcotraficantes, matones y asesinos de todo tipo.

Según se conoce, en dicho lugar hay varias bandas y se producen peleas y agresiones diarias entre los presos, que viven casi amontonados por culpa de la sobrepoblación que hay en las cárceles del país. Se estima que hay un 300% más de ocupación de lo que debería en los centros penitenciarios del país, lo que hace que los presos vivan en condiciones infrahumanas.

'El Hilton' se construyó con una capacidad de unos 3.500 convictos y hoy aloja a más de 8.000. En cada una de las pequeñas celdas conviven entre 50 y 60 personas, cuando la capacidad real es de unas 25.

Algunos exconvictos extranjeros que estuvieron en Bang Kwang han explicado que es muy difícil dormir, no solo por la densidad de hombres, sino por la fuerte luz que se queda encendida toda la noche, el insoportable calor y humedad que hace en las celdas y el hecho de que, en ocasiones, hay convictos que aprovechan para masturbarse sobre otros compañeros

Muertes en la cárcel

Luis Garrido Julve, periodista residente en Tailandia, ha visitado algunas prisiones del país y ha revelado que en 'El Hilton' la comida es muy poca y de mala calidad: "La comida, casi siempre arroz hervido con tropezones". Esto se suma a la falta de higiene y de agua en las celdas.

Los reclusos carecen de suficiente asistencia médica y tampoco reciben atención psiquiátrica. Además, las condiciones del lugar causarían un aislamiento de Sancho con el resto de los presos, ya que solo se habla tailandés

Según ha explicado el analista Fernando Cocho en el programa 'Código 10', la prisión de Bang Kwang "es una amenaza de muerte indirecta". La tasa de mortalidad en el centro se sitúa sobre un 25% cuando se cumplen los dos años encerrado. Los motivos: "Los reclusos mueren por desnutrición, enfermedades y violencia", ha señalado Cocho.

También se producen varios suicidios en el centro. Aunque no hay datos oficiales, hay una cantidad sorprendente de presos que fallecen por causas sospechosas.