El tercer sector pide que los comedores de colegios y casales queden fuera de la ley de contratos del sector público

El trimestre pasado saltó la noticia de que los comedores escolares de 42 guarderías de Barcelona, el 40% del total, pendían de un hilo al quebrar Comer Bien, la empresa que las gestionaba. La compañía, de Zaragoza, ganó el paquete de guarderías "de conformidad con la propuesta de la mesa de contratación" al haber presentado "la oferta económicamente más ventajosa de acuerdo con los criterios de valoración"; algo que es habitual tanto en los concursos para asignar la gestión de los comedores escolares de centros públicos como de los ‘casals’ de verano organizados por los ayuntamientos. Una situación de la que las entidades del tercer sector llevan tiempo alertando, no tanto por una cuestión de una suerte de competencia desleal, que también (por la lucha de David contra Goliat, sobre todo en el caso de las afas), sino por el impacto que dar estos servicios a este tipo de empresas sin ninguna vinculación ni arraigo con el territorio tiene en el propio servicio.

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Así, en el actual clima preelectoral, la Fundació Catalana de l'Esplai (Fundesplai) ha aprovechado este miércoles el almuerzo anual con la prensa para presentar sus proyectos para pedir a los grupos políticos una regularización de la acción concertada, “haciendo posible que los servicios y actividades de atención a las personas queden garantizados en un marco contractual más ágil, basado en la colaboración público-social que aporte de manera activa y sistemática valor social a las personas y a la comunidad”. “Un marco de relación donde el tercer sector se considere un aliado estratégico en un modelo que articule la gestión de los servicios de atención a las personas al margen de la ley de contratos del sector público, garantizando por encima de cualquier otra consideración la protección de los derechos sociales y la calidad de la atención a las personas, especialmente las más vulnerables”, ha señalado el presidente de la fundación, Josep Gassó. 

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En la misma dirección, la lista de propuestas de la fundación para el 12 de mayo incluye también "aprobar la proposición de ley del tercer sector social", que ha de permitir, aseguran, “dotar de marco legal y reconocer el papel y contribución de las más de 3.000 entidades sociales catalanas”.

Reconocimiento legal

"El tercer sector necesita urgentemente un reconocimiento legal que le permita llevar a cabo y valorar sus proyectos indispensables para garantizar el bienestar y la protección de los colectivos más desfavorecidos", ha señalado Gassó, quien ha insistido en que “es necesario contar con el apoyo institucional y asegurar la participación activa del tercer sector social en el diseño y la implantación de las políticas públicas que afectan a las personas en riesgo de exclusión". 

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"Este marco ha de permitir también disponer de un sistema de financiación justo que dignifique el trabajo de la organización y resuelva los problemas graves de financiación del tercer sector”, ha añadido.

Colonias con piscina

Más allá de las propuestas a los partidos, el presidente de Fundesplai ha explicado que las casas de colonias que gestionan tendrán las piscinas en funcionamiento este próximo verano, una de las grandes preocupaciones de las familias. De hecho, ha detallado, muchas casas ya tienen las piscinas tapadas durante todo el año para evitar el agua se evapore o ensucie, y "no tendría sentido que ahora les obligaran a vaciarlas". "El derecho al ocio es un derecho", ha recordado.

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Asimismo, desde la entidad aseguran que los 'esplais' ya hacen mucha concienciación a los menores y toman medidas de ahorro de agua en muchos ámbitos "desde hace muchos años". Fundesplai cuenta con 27 casas de colonias, albergues de naturaleza y terrenos de acampada, 18 de ellas con piscina.

Para este verano, los 127 'esplais' y proyectos de ocio educativo que forman parte de Fundesplai tienen actividades previstas con una capacidad total de más de 90.000 plazas, y 1.100 tandas de 'casals', colonias, campamentos, campos de trabajo y colonias en familia, para las que prevén unas 8.000 becas y ayudas.