Educación en Catalunya

El horario escolar, a revisión en Catalunya: las familias urgen a recuperar el comedor en la ESO

El Departament d'Educació ha encargado un informe sobre el impacto de la jornada intensiva para afrontar "con evidencias" la reforma horaria

Catalunya aborda la reforma horaria escolar y baraja que los institutos vuelvan a dar clase por la tarde

La reforma horaria se encalla en el instituto: Educació permite que el 88% de centros no den clase por la tarde

Instituto catalán ubicado en un barracón escolar, el curso pasado.

Instituto catalán ubicado en un barracón escolar, el curso pasado. / JOAN CORTADELLAS

Helena López

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Pese a lo espinoso que resulta siempre abrir el melón del horario escolar, hay una cuestión en la que prácticamente hay consenso (del sindicato USTEC a CCOO, de la Fundació Bofill a la aFFAc): la necesidad de ofrecer un servicio de comedor escolar universal y gratuito; algo que, por el momento, no se avista en un horizonte cercano, teniendo en cuenta que Catalunya tiene el comedor escolar más caro del Estado y el año que viene subirá por tercer año consecutivo.

El sindicato Ustec aboga no por suprimir la jornada intensiva en la ESO, sino por extenderla a primaria

La información sobre el estudio encargado por el Departament d’Educació al Institut Català d'Avaluació de Polítiques Públiques (Ivàlua) para evaluar el impacto de la jornada continuada (o intensiva) en el alumnado ha provocado no pocas reacciones entre los docentes. Desde el sindicato USTEC, su portavoz, Iolanda Segura, responde con contundencia: "No solo estaríamos en contra de que se suprimiera la jornada continuada en los institutos, sino que apostamos porque la jornada continuada se implemente también en las escuelas de infantil y primaria".

A ojos de la portavoz sindical –análisis compartido por muchos docentes que llevan años a pie de aula – "está más que comprobado que, a nivel de atención del alumnado, las horas de la mañana son mejores".

Tardes más conflictivas

"Los que estamos en primaria lo vemos a diario, las clases de la tarde se hacen muy pesadas, y con los adolescentes, aún peor", señala Segura, quien pone sobre la mesa la cuestión de la conflictividad. "Por las tardes, si hay más cansancio, hay más conflictividad en el aula", zanja precisando que la jornada intensiva que defiende para todos los ciclos educativos no es incompatible por unos comedores escolares abiertos y gratuitos, que dieran paso tardes con extraescolares también de carácter universal. 

La portavoz de CCOO Educació, Teresa Esparabé, quien coincide en la necesidad del comedor universal [uno de los efectos colaterales de la generalización de la jornada intensiva en los institutos en el marco de los recortes del 2012 fue el abandono y cierre de cantinas y comedores en secundaria] considera que tiene que haber una evaluación del sistema también respecto a los horarios.

Necesidad de consensos

"Se han introducido cambios durante los últimos años, y no se ha hecho ninguna evaluación. Necesitamos datos y un análisis del impacto que este tipo de jornada está teniendo en el sistema, y, cuando haya cambios, tiene que haber un consenso de toda la comunidad educativa", opina Esparabé, quien insiste en la necesidad un “debate y reflexión en claustros y consejos escolares”.

La urgencia de la recuperación de los comedores escolares también en secundaria es apuntada también tanto por la socióloga Elena Sintes, desde la Fundación Bofill, como la presidenta de la aFFac, Belén Tascón.

La voz más crítica

El presidente del sindicato Professors de Secundària, Xavier Massó, se mostraba este lunes en sus redes sociales muy contrario a volver a la jornada partida. "La única evidencia de la jornada partida es el lucro de las empresas de cátering, de ocio educativo y paraeducativas en general, que rapiñan como buitres alrededor de la educación para convertirla en un negocio a su servicio. Es la mercantilización de la educación. No hay otra", expresaba el catedrático en la red social X.

Actualmente, el 88% de los institutos públicos catalanes ofrecen jornada intensiva -prácticamente todos, excepto los de nueva creación y los instituto-escuela- mientras prácticamente la totalidad de la escuela privada-concertada ofrece jornada partida. 

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