Plan polémico

Ecologistas ven "temeraria" la tala puntual de árboles para aliviar los embalses en Catalunya

14 entidades emiten un comunicado en contra de la propuesta y exigen una evaluación ambiental pormenorizada del plan

Catalunya talará árboles en las cabeceras de los ríos para que llegue más agua a los embalses

Guillem Costa

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La plataforma Ecologistes de Catalunya considera que la idea de talar árboles (de forma puntual y quirúrgica) en las cabeceras de los ríos para hacer llegar más agua a los embalses es una "acción temeraria". Este plan que adelantó días atrás EL PERIÓDICO y que aún se debe concretar ha indignado a 14 entidades ambientales que firman este comunicado.

Las entidades han enviado una carta a la Generalitat expresando su descontento

Los grupos ecologistas han enviado al conseller de Acció Climàtica, David Mascort, y a la directora de Boscos, Anna Sanitjas, un documento en el que expresan su oposición frontal ante la propuesta. En el escrito, afirman que la idea del Departament no tiene en cuenta muchas de las funciones vitales que realizan los bosques, tanto para el almacenamiento de agua y carbono como para la biodiversidad.

Estudio científico

Sanitjas, en conversación con este diario, precisó que el proyecto se sacaría adelante después de estudios basados en la ciencia. De hecho, tanto miembros del CREAF (Centro de Investigaciones Ecológicas y Aplicaciones Forestales) como la CTFC (Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Catalunya) detallaron que el plan consistía en analizar qué árboles se podían eliminar solo en bosques jóvenes que han crecido con "excesiva densidad" y comprobando siempre que no suponía un riesgo para la pérdida de biodiversidad.

Aun así, Ecologistes de Catalunya discrepa: "Para disponer de más agua se debería actuar sobre una extensión de territorio demasiado grande, lo que tendría unas consecuencias complejas e imprevisibles". Opinan que la prioridad debe ser orientar esfuerzos a soluciones reales que faciliten la adaptación al cambio climático. Resaltan la necesidad de gestionar la oferta y la demanda de agua, asegurando que la segunda no ponga jamás en jaque los recursos disponibles.

En caso de que este plan avance y se ponga en marcha, en forma de prueba piloto, los ecologistas piden que se tramite a través de un proyecto que incluya una evaluación ambiental de los efectos que puede tener la medida.