Catalunya trabaja para declarar la emergencia por sequía en dos semanas

El Govern ha explicado este lunes a los gimnasios y clubes deportivos los detalles de la restricción que afectará a las duchas y les ha asegurado que trabaja para declarar la emergencia en los próximos días. En concreto, en este encuentro, el Govern ha hablado de la fecha del 1 de febrero, cuando se prevé que los pantanos del sistema Ter-Llobregat se encuentren al 16% de su capacidad (ahora están al 16,8%). Así lo han comunicado a este diario fuentes presentes en una reunión que ha servido para trasladarles cómo será la restricción sobre las piscinas y el riego de césped, una medida a la que se incorporarán nuevas modificaciones que este martes debe aprobar el Consell Executiu, si no hay cambios de última hora.

La emergencia por sequía, el semáforo rojo, tendrá tres fases (emergencia 1, emergencia 2 y emergencia 3). En la emergencia 1, según operadores a los que ya se ha notificado el plan de actuación, los centros deportivos que dispongan de piscina y pretendan llenarla (aunque sea de forma parcial) deberán compensar el agua gastada para ello. ¿Cómo? Podrán hacerlo cerrando algunas duchas o reduciendo el uso de agua en las instalaciones de otra forma. Pero cerrar las duchas, en esta primera etapa, no será forzoso. En cambio, en el caso de llegar a la fase 2 (en abril, si antes no llueve lo necesario) será obligatorio que los centros deportivos que necesiten llenar piscinas cierren las duchas. Los gimnasios sin piscinas (o con piscinas de agua salada) podrán mantener las duchas en funcionamiento durante estas dos primeras subfases de la emergencia (la 1 y la 2).

En cambio, en la fase 3 de la emergencia (si no llueve, se se podría declarar en verano), las duchas las tendrán que cerrar todos los gimnasios, según ha concretado esta mañana la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) en el encuentro con el sector.

Césped sin regar

En el caso de las piscinas descubiertas donde se practiquen deportes federados, deberán cerrar forzosamente las duchas en la fase 1, puesto que estos espacios sufren más la evaporación. La idea inicial era prohibir el llenado parcial de las piscinas sin estas excepciones. Pero finalmente, explican los presentes en el encuentro, el Govern ha optado por esta solución más flexible.

Por su parte, los clubes que necesitan regar el césped o la tierra batida deberán actuar de forma similar. En emergencia 1, si siguen regando (solo con agua regenerada o agua freática, en ningún caso con agua potable), deberán compensar el gasto de agua de riego como consideren, sin la obligación de cerrar duchas. En emergencia 2, si siguen regando, ya deberán cerrar las duchas. Y en emergencia 3, directamente no podrán regar.

Estas restricciones sobre las duchas y el riego para los clubes deportivos representan tan solo una de las muchas medidas que se activarán cuando entre en vigor la emergencia. Como ya anunció el Govern en las últimas semanas, también se restringirá el riego de zonas verdes, se reducirán los caudales ecológicos para sacar más agua de los ríos y se pondrá en marcha una moratoria para impedir que abran o se amplíen actividades económicas que consuman grandes cantidades de agua (hoteles, granjas...).

Esta nueva flexibilización entrará en vigor en los próximos días en los 37 municipios del Empordà y el Baix Camp (además de Vallirana) que ya se encuentran en emergencia 1. Barcelona y 202 municipios más del sistema Ter-Llobregat (Girona, Maresme, Vallès, Catalunya Central, Garraf o Penedès, entre otras zonas) seguirán en el estado de preemergencia hasta que el Govern dé el paso de decretar la peor fase del Plan Especial de Sequía, previsiblemente la semana en la que empieza el mes de febrero.

Los jardineros exigen seguir regando para salvar las zonas verdes públicas y privadas

El sector defiende sus medidas de ahorro

El sector del deporte llevaba meses preocupado por las posibles restricciones que podían afectarles en caso de emergencia. En un principio, estaba previsto prohibir directamente el llenado de piscinas y hasta cerrar duchas, lo que provocó alarma cuando se anunció a mitad de diciembre. Finalmente, el Govern ha escuchado algunas de sus demandas y cifras. Al encuentro de este lunes han asistido representantes de la Asociación de Empresas de Clubs Catalanes de Fitness (ADECAFF), de clubs importantes como DiR, de Gestiona (la asociación catalana de operadores de centros deportivos públicos) y de asociaciones de clubs de natación.

Iolanda Latorre, de ADECAFF, asegura que tienen una sensación "agridulce": "Nos han escuchado y finalmente las piscinas se podrán ir llenando, algo que no estaba previsto en la emergencia, aunque no vemos demasiado sentido a la restricción de cerrar duchas para mantener las piscinas". Fuentes de Gestiona (que opera casi el 90% de la oferta de centros deportivos de Barcelona y el 40% de toda Catalunya) han valorado que el Govern haya dado marcha atrás en su posicionamiento de hace un mes, y haya escuchado las aportaciones del sector para crear una implantación "progresiva" de medidas. Pero han insistido en que es necesario "mucho más diálogo" con los afectados, ante los graves efectos que las restricciones pueden suponer a la práctica deportiva.

En este sentido, el mismo portavoz ha recordado que la renovación de agua en las piscinas es actualmente muy inferior al 5% que recogía la regulación de 1986, y que en muchos casos ronda el el 1% o menos dados los esfuerzos que ha hecho el sector para su recirculación y optimización. Gestiona documenta con sus análisis que los dosificadores de sus duchas rondan los 12 litros por minuto de consumo frente al doble en los domicilios particulares. Además, la rotación de usuarios, sus prisas y el hecho de que el agua salga directamente caliente hace que ducharse en el gimnasio suponga incluso un ahorro de agua, aducen.

Flexibilización satisfactoria

Por ello proponen al Govern que flexibilice aún más sus exigencias si con las medidas introducidas en los centros catalanes, más la concienciación entre los usuarios, se logra reducir el 20 o 25% de gasto de agua.

DiR, con 100.000 socios y 98.000 metros cuadrados de instalaciones, es la principal cadena de gimnasios privados. Lleva años desplegando medidas de ahorro de agua, destacan fuentes del centro, como disminuir hasta un mínimo de 10 segundos la duración de cada pulsación de agua, así como el volumen de agua (de 4 a 6 litros) y su mezcla con aire para optimizarla, gracias a las nuevas alcachofas de ducha. "El consumo es un 30% menor en los gimnasios", mantienen. Otro tanto sucede con las piscinas, donde el agua se trata y reinserta en el circuito sin merma, defienden.

El club recuerda que la actividad física es un "bien esencial", como constató la pandemia, y que el sector aún no se ha recuperado de la crisis que sufrieron durante el covid-19. Sin duchas, muchos usuarios que eligen gimnasios o centros cerca de casa o el trabajo podrían optar por no asistir ante la complicación de no poder asearse tras el ejercicio. Apoyan que se hayan recogido algunas de sus demanas, pero lamentan no haber sido convocados hasta un día antes de la entrada en vigor del decreto y piden más voz, así como ayudas y recursos de la Administración para que no todo el esfuerzo corra a cargo de los operadores.