Los Mossos detienen a dos falsos operarios del gas que estafaron 50.000 euros a personas vulnerables en Barcelona

Los Mossos d'Esquadra detuvieron a dos hombres de 25 y 26 años acusados de los delitos de estafa, hurto y robo con violencia e intimidación ya que se hacían pasar por falsos operarios de gas o electricidad para asaltar viviendas de personas vulnerables, como ancianos. La investigación comenzó el pasado agosto cuando una mujer del distrito de Sants-Montjuïc de Barcelona denunció que dos hombres se presentaron en su domicilio y se hicieron pasar por comerciales de electricidad.

En un momento de descuido, los sospechosos le robaron la tarjeta SIM del teléfono móvil y la tarjeta de crédito. Al irse de la vivienda empezaron a hacer compras y reintegros por valor de 17.000 euros además de hacerse transferencias por bizum con la información que sacaron de la SIM.

A partir de esta denuncia, los investigadores descubrieron que había otros casos similares con sospechosos que tenían las mismas características físicas y que actuaban siempre de forma idéntica: conseguían datos de las víctimas, como el nombre, edad y dirección y seleccionaban las de edad avanzada. Después iban a sus casas y se presentaban como comerciales de compañías de gas o electricidad que ofertaban descuentos en la factura.

Según los Mossos, no levantaban sospechas ya que "su indumentaria era muy correcta y usaban documentación acreditativa de diferentes compañías" por lo que se ganaban la confianza de las víctimias y entraban en su domicilio. Con la excusa del descuento pedían datos bancarios y tarjetas o acceder a su banca por internet. Entonces mientras uno de los detenidos distraía a la víctima el otro robaba la tarjeta de crédito o cambiaba la targeta SIM del móvil y se la pasaba a su compañero que se iba de la vivienda y empezaba a hacer reintegros.

Si alguna de las víctimas se daba cuenta del engaño la intimidaban o usaban la violencia para robarle, según la policía. Los Mossos los relacionan con 14 sustracciones o estafas, 9 de ellas en el distrito de Sants-Montjuïc u el resto en Nou Barris y Sant Andreu. La cantidad estafada es de unos 50.000 euros. La semana pasada los agentes detuvieron a los sospechosos en sus viviendas de Gavà y Castelldefels y en el registro se localizaron tarjetas, libretas bancarias y otros documentos de las víctimas. El Juzgado de Instrucción 20 de Barcelona se encarga de la investigación.