Zonas húmedas

La Bassa de Llinars se salvará y acaba la acampada ecologista

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La Generalitat ha comunicado a los ecologistas que obligará a la empresa a recuperar el espacio

llinars bassa

llinars bassa / Boi Ramoneda

Guillem Costa

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Punto y final a la acampada de la Bassa de Can Tàpias tras dos semanas de resistencia ecologista. El Govern ha acudido en las últimas horas hasta la charca para comunicar su decisión a los miembros de la plataforma Salvem la Bassa de Llinars: obligará a la propiedad a parar los trabajos de los camiones definitivamente y se les propondrá un plan de restauración del espacio. Esto es lo que ha explicado la entidad después del encuentro.

Mireia Boya, directora de Cambio Climático, y Marc Vilahur, director de Políticas Ambientales, son los dos representante de la 'conselleria' que han dado los detalles a los ecologistas. Entre junio y julio, se elaborará un plan de restauración en el que la plataforma podrá participar. En este proceso se determinará cómo será el espacio en el futuro.

Barcelona 21/04/2023 Sociedad Vecinos luchan para salvar la bassa de Llinars. AUTOR: JORDI OTIX

Uno de los actos de reivindicación durante las últimas semanas en la Bassa de Llinars. / Jordi Otix

Es un espacio que se formó de manera natural, después de que la explotación minera que había en la zona quedara abandonada. El hueco se cubrió con agua freática y plantas y pájaros proliferaron. Semanas atrás, la propiedad del terreno empezó a llenar de tierra el estanque para secarlo y hacer desaparecer la charca.

Juicio pendiente

"Queremos custodiar el espacio y seguir pendientes de cómo evoluciona esta zona húmeda", proclama Eduard Nus, uno de los activistas. Acaban con la acampada porque interpretan la decisión del Govern como una victoria: "Si se ha optado salvar la charca es gracias a nuestra movilización. Hemos acelerado una burocracia que siempre es demasiado lenta".

Consideran que han logrado que, durante las últimas semanas, la Bassa de Llinars se convirtiera en un punto de encuentro entre vecinos. "Lo que hemos visto con la Bassa es uno de los ataques del sistema hacia el territorio, a veces pasan desapercibiditos, pero esta vez lo hemos conseguido parar. A la empresa le salía más rentable llenar la charca de tierra que preservar la vida que se estaba generando en el espacio", critica.

Hoy la propiedad del terreno ha citado a los ecologistas en un juicio en Granollers por ocupación y coacción, ya que para frenar los trabajos de los camiones, se interpusieron. A esta acusación, Nus responde de esta forma: "Sí, hemos coaccionado a la propiedad para que no cubriera con tierra esta charca. Y lo reivindicamos".