Un operativo contra el tráfico de marihuana en el Baix Llobregat acaba con 10 detenidos

Los Mossos d'Esquadra han activado este miércoles de madrugada un dispositivo policial contra el tráfico de drogas en el Baix Llobregat (Barcelona). Según las fuentes consultadas por EL PERIÓDICO, se trata de otra organización criminal dedicada a cultivar marihuana en Catalunya para su posterior exportación al resto de Europa, una forma de operar frecuente tras el preocupante 'boom' cannábico que ha convertido a España en un huerto europeo de la marihuana.

Los Mossos han llevado a cabo una decena de registros en domicilios en las localidades de Martorell, Vallirana i Castellví de Rosanes. En estos tres municipios de la comarca del Baix Llobregat los investigadores han practicado también una decena de detenciones. La banda cultivaba la marihuana en plantaciones ocultas en casa unifamiliares de urbanizaciones. Algunos de estas residencias estaban siendo ocupadas ilegalmente pero otras disponían de contrato de alquiler.

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Una de las detenciones se ha efectuado en el bloque de pisos ubicado en el número 20 de la calle Sant Genís de Rocafort, en Martorell. El sospechoso es un ciudadano español de origen marroquí que residía junto a su madre en un domicilio de la cuarta planta. Según las fuentes consultadas, hay miembros investigados de diversas nacionalidades.

El 'boom' de la marihuana

El boom de la marihuana que comenzó a extenderse por Catalunya y por el resto de España en 2015 tiene efectos nocivos para la salud de los consumidores –al tratarse de un mercado desregulado, los productores cultivan semillas hibridadas con concentraciones de THC altísimas–, para la economía –también es un mercado negro que supone una competencia desleal entre trabajadores y una fuente de dinero negro y, en consecuencia, de redes de blanqueo de capitales–, para la integridad de las instituciones democráticas –un estudio de los Mossos avanzado por este diario concluye que la envergadura de las mafias las capacita para intentar corromper a políticos y policías– y para la seguridad. Pero también se ha convertido en un problema de seguridad de primer orden.

Los Mossos activaron en 2018 el 'Pla d'Acció Marihuana'. Dentro de ese plan, la Comisaría General de Investigación Criminal (CGIC) encargó al Área Central de Análisis de la Criminalidad (ACAC) el informe 'El Mercado de la marihuana en Catalunya', que analiza las causas y los riesgos de este fenómeno y que este mes de julio ha sido entregado a la Fiscalía de Catalunya. Las conclusiones del estudio, a las que ha tuvo acceso EL PERIÓDICO, avanzaron un escenario preocupante para la paz social: la dimensión de algunas estructuras criminales –la mayoría de origen extranjero– afincadas en Catalunya y dedicadas a la producción y exportación de marihuana hace temer a la policía catalana que en un futuro próximo estas puedan tratar de corromper a los poderes públicos para seguir creciendo.

Para los Mossos, la marihuana, ya desde antes de la pandemia, se ha convertido en la mayor amenaza para la estabilidad de Catalunya y preocupa que cada vez con más frecuencia se detecten armas de fuego cuando se investiga a la organizaciones.