Seis consejos para que los catalanes ahorren agua en casa

En las próximas décadas, a causa del consumo intensivo y del cambio climático, la escasez podría ser un problema

El agua, un bien cada vez más escaso

El agua, un bien cada vez más escaso / Archivo

Xavier Pareja

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El agua es el principal ingrediente de la vida y el recurso natural más importante del planeta. La bebemos, la utilizamos en la higiene personal y para la limpieza de espacios, para producir alimentos a través del riego en la agricultura y, entre otros, también para producir energía eléctrica limpia que, junto a otros modelos como la fotovoltaica, servirá para abandonar un modelo de generación basado en el uso de los combustibles fósiles. La vida en el planeta no existiría sin el agua, aunque muchas veces parece que no le demos tanta importancia.

La necesidad que tenemos hacia este recurso natural se ha reflejado de forma muy clara este año, uno de los más secos en toda España y Europa. La falta de lluvias y el déficit de agua en los embalses hicieron que, por ejemplo, en octubre, 301 municipios de Catalunya entrasen en estado de alerta por sequía y se impusieran algunas restricciones en el uso del agua.

El uso intensivo que le damos a este recurso y el cambio climático hacen más necesario que nunca proteger el agua y optimizar al máximo su uso. De lo contrario, en las próximas décadas las consecuencias podrían ser muy graves.

¿Por qué hay que ahorrar agua?

La cantidad de agua en la Tierra es alta, pero no toda es apta para consumo humano. El planeta cuenta con 1.386 millones de kilómetros cúbicos de este recurso. Un dato que podría considerarse alto, si no fuera porque, tal y como apuntan datos de Fundación Aquae, el 97% de esa agua se encuentra en los océanos y el 2% permanece congelado. Es decir, el agua apta para consumo humano es una muy pequeña parte de la que hay disponible.

Los problemas, en este sentido, ya son visibles. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 3 de cada 10 personas en el mundo carecen de acceso a servicios de agua potable seguros y 6 de cada 10 no cuentan con acceso a instalaciones de saneamiento gestionadas de forma segura. El 40% de la población mundial se enfrenta a la escasez de agua.

Vista del pantano de Sau.

El pantano de Sau el pasado verano / JOSEP LAGO / AFP

Pero las previsiones para el futuro son menos halagüeñas. Según un informe de la Organización Mundial de Meteorología (OMM), si no se toman medidas al respecto, en 2050 los problemas de escasez o contaminación del agua podrían afectar a 5.000 millones de personas, casi la mitad de la población mundial.

Por este motivo, la protección del agua está recogida en la Agenda 2030 de Naciones Unidas, concretamente en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 6, que busca garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el saneamiento para todos.

¿Por qué el agua salada también es importante?

Que el agua de los océanos no sea potable, no significa que no sea un recurso igual de importante. Los océanos al final son uno de los hábitats con mayor diversidad en el mundo, más del 90% del espacio habitable del planeta y contienen 250.000 especies conocidas (más las que quedan por descubrir), según Naciones Unidas.

Además, esta misma fuente apunta a que las evidencias del papel que juega la biodiversidad para la salud del planeta cada vez son más evidentes. Y es que, la superficie de los océanos absorbe casi un tercio del CO₂ emitido a la atmósfera por las diferentes actividades humanas. Por lo que se reducen los gases de efecto invernadero en la atmósfera.

Pero no solo eso, los océanos también son el gran pulmón del mundo. Gracias al fitoplancton (unos microorganismos autótrofos), tal y como señala National Geographic, se libera entre el 50 y el 85% de oxígeno a la atmósfera. Esto supone unos 27.000 millones de toneladas al año.

Algunas ideas para ahorrar agua en casa

El ahorro de agua es una labor que implica a toda la sociedad, según la OMS el gasto diario de agua por persona debería situarse entre 50 y 100 litros. Desde casa, con algunos pequeños gestos, podemos llegar a evitar el despilfarro de decenas de litros diarios. Se trata de acciones simples, situaciones que muchas veces no tenemos en cuenta, pero que pueden ser muy útiles:

  1. Arregla las fugas de agua. ¿Sabías que una fuga gota a gota puede suponer una pérdida de 30 litros de agua diarios? Una pequeña gotera puede parecer algo irrisorio, pero si la mantenemos durante una semana estaremos perdiendo 270 litros de agua y, al mes, serán 840 l. Imagínate lo que puedes ahorrar reparando estos pequeños desperfectos.
  2. Cierra los grifos mientras no los usas. Los grifos usan entre 3 y 4 litros de agua por minuto. Si dejamos abierto el grifo durante un cepillado de dientes de algunos minutos, podemos perder una gran cantidad de agua. Lo mejor es llenar un vaso para enjuagarse la boca al acabar.
  3. No uses el inodoro como papelera. Una cisterna tiene en su interior una media diez litros de agua. Las más nuevas cuentan con un mecanismo de descarga dosificada, pero no las antiguas. Así que cada vez que tiramos de la cadena perdemos una cantidad de agua importante. Si, además, usamos el inodoro para lanzar papeles u otras cosas, la cantidad se incrementa.
  4. Usa lavavajillas. Según la OCU, gastamos 88,8 litros diarios cuando fregamos los platos a mano. Con un lavavajillas podemos ahorrarnos 30,6 litros de agua diarios. Además, ahorrarás tiempo y consumo de energía.
  5. Reutiliza el agua siempre que puedas. Aunque no siempre es posible, hay ocasiones en las que podemos reaprovechar el agua para otros usos. Por ejemplo, mientras esperas que se caliente el agua de la ducha, puedes poner un cubo para recoger la fría y darle otros usos como fregar los platos o regar las plantas.
  6. Pon la lavadora con la carga llena. La lavadora consume agua en función de su capacidad de carga. En el caso de una de 5 kg, estaríamos hablando de entre 39 y 52 litros por lavado. Es importante aprovechar al máximo la carga y no realizarlas con lo mínimo.

Gestos básicos con los que podemos ahorrar una cantidad muy importante de agua cada año.

Energía hidráulica para la generación de electricidad

Pero el agua no solo es un recurso básico para nuestra supervivencia, también juega un papel fundamental para generar electricidad. Las energías limpias son fundamentales para conseguir luchar contra el cambio climático. En este sentido, con el agua se genera la energía hidráulica, aquella que se obtiene aprovechando la energía cinética de las corrientes, los saltos o mareas. Una energía que, además, puede reducir lo que pagamos en la factura de la luz, puesto que es una fuente mucho más barata.

Esta fuente de energía limpia es la más utilizada en el mundo. Según la Agencia Andaluza de la Energía, España posee un gran parque hidroeléctrico con unas 1.300 centrales y 900 minicentrales que en total generan unos 23.000 MWh. Esto supone el 18% del total de la electricidad que se produce en España.

La sequía lleva a la producción hidráulica al nivel más bajo de su historia

Una central hidráulica / Archivo

Para captar esta energía y convertirla en electricidad se utilizan presas que retienen el agua para dejarla caer posteriormente en grandes cantidades y desde una altura considerable, moviendo turbinas que generan energía mecánica. Tras esto se produce la energía hidroeléctrica y se lleva la electricidad desde las centrales hasta los hogares.

Pero la energía hidráulica generada en España está concentrada en su totalidad en 5 comunidades autónomas. Datos obtenidos en el portal Statista, apuntan que Castilla y León en cabeza, generó aproximadamente 7.850 GWh de energía hidráulica en 2021, seguida de Galicia (6.764), Cataluña (2.922), Aragón (2.246) y Extremadura (2.075).

La energía eólica marina

Además, durante los próximos años asistiremos a un despliegue de la energía eólica marina, que es aquella que aprovecha la mayor potencia de la fuerza del viento en los océanos para, a través de unos aerogeneradores instalados en plataformas fijas o flotantes sobre el mar, generar electricidad renovable.

Así, Naturgy está trabajando, junto con Equinor, en el desarrollo del proyecto Floating Offshore Wind Canarias (FOWCA), con el que quieren optar a la instalación de más de 200 MW de eólica marina flotante en el espacio marítimo del este de Gran Canaria.

Este parque eólico marino reduciría las emisiones de CO₂ equivalentes a 350.000 coches al año. Según el estudio encargado a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, se estima que el proyecto podría generar más de 2.500 puestos de trabajo en todas sus fases, incluyendo puestos directos, indirectos e inducidos.

Abrazar el agua

La ilustradora Nuria Díaz ha querido plasmar en su obra para el proyecto EnergyzArte, elaborado por Prensa Ibérica con la colaboración de Naturgy, la importancia del cuidado del medio ambiente con una imagen simbólica de una mujer que abraza a la naturaleza con el agua como protagonista de la ilustración.

Los abrazos son una forma de comunicación no verbal que utilizamos para acompañar, proteger, aliviar, querer… Es un gesto que tenemos con nuestro círculo cercano, familiares o amigos, pero que también deberíamos tener con todo aquello que queremos proteger, como