Conflicto en Catalunya

Ocio nocturno y restauración sufren un alud de devoluciones de entradas y cancelaciones

Actividad en un restaurante del Eixample.

Actividad en un restaurante del Eixample. / RICARD CUGAT

Patricia Castán

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En el ocio nocturno y la restauración había esperanzas de que la justicia no avalase el polémico toque de queda con el que Catalunya se desmarca de otras autonomías para combatir la pandemia. Esa opción hubiera permitido que al menos los restaurantes salvasen la campaña navideña. Pero la "dureza" de las medidas ha pulverizado toda expectativa, y ha abierto un alud de demandas de devolución de entradas para locales nocturnos (caso de Fin de Año) y de cancelaciones de reservas en restaurantes y hoteles.

La federación de ocio y restauración Fecasarm ha anunciado además que el lunes presentará recurso contencioso administrativo contra las restricciones de aforo y los cierres, que consideran "desproporcionadas y no indispensables". El colectivo cree que además se está desincentivando la vacuna entre los más jóvenes --"eramos un aliado estratégico"-- y estima solo las pérdidas de Nochevieja en 75 millones para cada sector, por lo que las ayudas de 20 millones ofrecidas por el Govern "no cubrirán nada", lamenta su secretario general, Joaquim Boadas.

Las medidas del Govern ya provocaron el martes un rechazo durísimo y unánime por parte de todas las patronales de ambos sectores, aunque confiaban en que el TSJC tumbase el recorte horario y de reuniones. Han aguardado hasta el final para desconvocar celebraciones. Así, la Nochevieja, su fecha más rentable del año, se queda sin ocio nocturno, pero también deja al borde del precipicio a la restauración. ¿Quién quiere cenar fuera de casa para tener que volver corriendo a casa, cual Cenicienta tras las 12 campanadas?, se preguntan.

Turismo frustrado

Christian Compte, presidente de Fecalon, que aglutina a locales de ocio catalanes, es uno de los empresarios que adelantaron una seudo Nochevieja a la pasada madrugada para despedirse de sus clientes en la sala Totem de Tarragona. Se siente desolado por la nueva clausura, que considera "injusta e inútil". "La gente ya llama para que se le devuelva el importe de las entradas, y lo teníamos casi todo vendido", se queja. Otro tanto sucede en restaurantes y hoteles de la zona, en especial en Salou, que esperaba muchos viajeros franceses, agrega.

Este representante, como otros, censura la "radicalidad" de las medidas catalanas respecto al resto de comunidades. "No sabemos a qué juega el Govern, que sigue ocultando que el foco de los contagios está ahora en las escuelas, donde no hace nada". La entidad, así como el Gremi de Discoteques de Barcelona i Província, seguían analizando el documento judicial esta tarde, porque les presentaba varias dudas.

Diversas fuentes hoteleras consultadas en Barcelona por este diario también aluden a las anulaciones de reservas que no han dejado de producirse desde que se anunciaron las medidas, por parte de turistas extranjeros que pensaban venir a la ciudad para despedir el año, cuando los establecimientos alcanzan una gran ocupación.

Ágapes desconvocados

Para Roger Pallarols, director general del Gremi de Restauració de Barcelona, se ha confirmado "el peor escenario de Navidad, con decisiones que nadie sigue en el resto de España y que ahora no tienen sentido con un 80% de población vacunada". El enfado del sector --afectado también por los aforos recortados-- se ha ido incrementando con las declaraciones de los responsables de Salut, que se iban traduciendo en cancelaciones de cenas de empresa primero, y ahora de reservas de grupos de Navidad o Nochevieja, tanto por los horarios como en los casos de familias que suman más de 10 integrantes.

"Catalunya vuelve a liderar las restricciones sin que su balance sanitario resulte mejor que otros, y en cambio está a la cola de la recuperación económica. La Generalitat elige la muerte empresarial", ha terciado. La patronal ha reclamado ayudas por valor de 730 millones, a razón de 3.000 por trabajador y autónomo, para afrontar la crisis. También pide al Gobierno central "una respuesta unitaria en materia de medidas anticovid que ponga fin a la discriminación que viven la restauración y la ciudadanía en Catalunya".

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