La autopsia no aclara cómo murió la excursionista de Montagut

La autopsia que se ha practicado este miércoles al cadáver de la excursionista hallada sin vida en un barranco de Montagut (Garrotxa) no ha aclarado las circunstancias de su muerte. El examen forense, según ha avanzado la ACN, no ha aportado resultados concluyentes porque no han aparecido signos de defensa o lesiones compatibles con una causa criminal.

La mujer, de 43 años, vecina de Girona y de nacionalidad checa, presentaba múltiples rasguños y contusiones y algún hueso fracturado que cuadrarían con heridas provocadas por una caída. Los forenses también han tomado muestras de tejidos que se enviarán a analizar en el laboratorio.

Los equipos de rescate localizaron el cuerpo de la mujer este lunes por la tarde en una zona de difícil acceso. Su pareja, con quien estaba de excursión en la zona, había denunciado su desaparición el domingo.

Los Mossos d'Esquadra investigan un caso, que todavía no tratan como una muerte de origen crimina, porque levantó sospechas el punto exacto en el que apareció el cadáver -de difícil acceso-, la pareja -un profesor universitario de unos 50 años que tardó varias horas en alertar a los servicios de emergencias- y el hecho de que la víctima se encontrara descalza por una zona de montaña.  

La pareja había ido a Sadernes, en la Alta Garrotxa, a hacer una ruta de unos días equipados con una tienda de campaña para hacer noche en diferentes puntos.