El Ayuntamiento de Salou, acusación particular por los desperfectos tras la muerte del mantero

El Ayuntamiento de Salou se personará como acusación particular en las diligencias penales por los desperfectos de los incidentes del pasado 11 de agosto tras la muerte de un mantero al precipitarse al vació cuando huía de los Mossos d'Esquadra, según ha informado este lunes el consistorio.

El Ayuntamiento se personará como acusación particular contra los causantes de los daños del pasado martes en una manifestación protagonizada por el colectivo senegalés,  en la zona de la plaza de Sant Jordi y calle de Barcelona, y que ocasionó hasta 9.000 euros en desperfectos (más 67.500 euros en las vías de tren y por el corte de la circulación ferroviaria, según Adif).

LEY DE EXTRANJERÍA

Esta mañana, el alcalde de Salou, Pere Granados (CiU), ha ordenado a los servicios jurídicos municipales que tramiten el expediente para que el Ayuntamiento se persone en la causa y designe abogado.

El alcalde ha asegurado que no permitirá los hechos queden impunes. "Los actos violentos deben tener consecuencias y se debe hacer caer todo el peso de la ley porque en una sociedad democrática no se puede tolerar ningún acto de esta virulencia. Nadie se puede tomar la justicia por su mano".

Esta actitud violenta -para Granados- merece "una condena civil y penal y que se aplique la Ley de Extranjería a los que estén en una situación irregular y que se incoe un expediente de expulsión; y aquellos que tengan permiso de residencia, que les consten los antecedentes penales a los efectos de la renovación y les sea denegada si es necesario". Granados considera que nos encontramos ante un fenómeno de agresión gratuita, sin sentido, y ante "estas actitudes debemos reaccionar".

INVESTIGACIÓN

La Policía Local de Salou está colaborando estrechamente en las diligencias para identificar a los autores de los incidentes que ocasionaron los cuantiosos destrozos.

Precisamente este lunes, el titular del juzgado de instrucción número 4 de Tarragona que investiga la muerte de Mor Sylla -el mantero senegalés de 50 años fallecido la semana pasada en Salou cuando huía de una redada contra el 'top manta'- toma declaración a cuatro testigos, entre ellos un hermano de la víctima.