Psicología

Bisexualidad: ¿cuántas falsas creencias tenemos sobre ello?

Lo heteronormativo puede generar prejuicios y discriminación

Feliz pareja de hombres homosexuales pasando tiempo juntos lgtbiq

Feliz pareja de hombres homosexuales pasando tiempo juntos lgtbiq / 123rf

Ángel Rull

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La bisexualidad, a menudo envuelta en un velo de malentendidos y prejuicios, representa una faceta importante y legítima de la diversidad humana. La orientación bisexual, caracterizada por la atracción emocional y sexual hacia más de un género, pone a prueba las nociones convencionales de sexualidad y requiere una consideración y respeto genuinos. En un mundo donde la heteronormatividad a menudo domina, es esencial ampliar nuestra perspectiva y reconocer la validez de todas las orientaciones sexuales.

¿Qué es la bisexualidad?

La bisexualidad es una orientación sexual donde una persona se siente atraída emocional y sexualmente tanto por hombres como por mujeres. Esta atracción no siempre es equitativa o constante, y puede variar a lo largo del tiempo. Es importante entender que la bisexualidad es una identidad legítima y válida, tan rica y compleja como cualquier otra orientación sexual.

Contrario a lo que algunos pueden pensar, ser bisexual no implica necesariamente una atracción 50/50 hacia ambos géneros. Algunas personas pueden sentirse más inclinadas hacia un género en particular en diferentes etapas de su vida, lo cual no invalida su bisexualidad. Es esencial reconocer esta fluidez como parte integral de la experiencia bisexual.

Además, la bisexualidad no excluye la posibilidad de sentir atracción por personas de géneros no binarios o personas trans. La inclusión y aceptación de la diversidad en la expresión de género y la identidad sexual son fundamentales en la comprensión moderna de la bisexualidad.

El prejuicio de la bisexualidad en la sociedad

A pesar de los avances en la aceptación y comprensión de la diversidad sexual, la bisexualidad aún enfrenta prejuicios significativos. Estos prejuicios a menudo se manifiestan en formas de invisibilización, estereotipos dañinos y la errónea idea de que la bisexualidad es una fase o una indecisión. La realidad es que la bisexualidad es una orientación tan estable y definida como cualquier otra.

El concepto erróneo de que la bisexualidad es simplemente una "parada en el camino" hacia la homosexualidad o la heterosexualidad es otro prejuicio común. Este tipo de pensamiento no solo es incorrecto, sino que también deslegitima la experiencia y la identidad de las personas bisexuales, relegándolas a una posición marginal en el espectro de la orientación sexual.

Además, existe una falta de representación y visibilidad de la bisexualidad en los medios de comunicación y la cultura popular. Esto conduce a una comprensión limitada y estereotipada de lo que significa ser bisexual, lo que puede resultar en una mayor estigmatización y malentendidos por parte de la sociedad en general.

¿Qué es la bifobia?

La bifobia es el rechazo o aversión hacia las personas bisexuales. Se manifiesta a través de actitudes, comentarios y acciones que deslegitiman o minimizan la bisexualidad. Esta forma de discriminación puede provenir tanto de la comunidad heterosexual como de la comunidad LGTBIQA+, lo que a menudo deja a las personas bisexuales en una especie de "tierra de nadie" en términos de aceptación y apoyo.

La bifobia puede ser explícita, como en el caso de insultos o discriminación directa, o puede ser más sutil, como en las actitudes condescendientes o la falta de reconocimiento de la bisexualidad como una orientación válida. Esta discriminación puede tener efectos profundamente negativos en la salud mental y el bienestar de las personas bisexuales.

Es crucial que las comunidades, tanto heterosexuales como LGTBIQA+, trabajen para comprender y aceptar la bisexualidad. La educación y la sensibilización son fundamentales para combatir la bifobia y promover una sociedad más inclusiva y respetuosa de todas las orientaciones sexuales.

Falsas creencias sobre la bisexualidad

Las falsas creencias sobre la bisexualidad han persistido durante mucho tiempo y han contribuido a la incomprensión y estigmatización de esta orientación sexual. Es esencial abordar estas creencias con un enfoque informado y respetuoso para fomentar una comprensión más precisa de la bisexualidad. Al desentrañar estos mitos, esperamos promover la empatía y la aceptación, permitiendo que las personas bisexuales vivan sus vidas con autenticidad y sin el peso de la discriminación.

Estos son los mitos más comunes:

1. "La bisexualidad no es real, es solo una fase"

Esta creencia minimiza y desvalida la experiencia de las personas bisexuales, sugiriendo que su orientación es temporal o incluso ficticia. Es fundamental reconocer que la bisexualidad es una identidad sexual permanente y legítima.

Esta idea refuerza la noción errónea de que la bisexualidad es una etapa transitoria hacia una orientación "más aceptable" o definida. Esta perspectiva no solo es incorrecta, sino que también perpetúa la invisibilidad y el estigma en torno a la bisexualidad.

2. "Las personas bisexuales son indecisas"

Este estereotipo perpetúa la idea de que las personas bisexuales no pueden comprometerse con una orientación sexual. En realidad, la bisexualidad es una clara preferencia por ambos géneros, no una indecisión.

Esta creencia también sugiere erróneamente que la bisexualidad es el resultado de una confusión o falta de claridad sobre la propia orientación sexual. Sin embargo, ser bisexual es una afirmación de identidad tan válida y definida como cualquier otra orientación.

3. "Si estás en una relación heterosexual, ya no eres bisexual"

La orientación sexual de una persona no cambia en función de su pareja actual. Una persona bisexual en una relación heterosexual sigue siendo bisexual, al igual que en una relación homosexual.

Este mito se basa en la percepción equivocada de que la orientación sexual debe estar alineada con el género de la pareja actual. La realidad es que la bisexualidad permanece como una parte intrínseca de la identidad de una persona, independientemente de con quién esté en una relación.

4. "La bisexualidad incrementa la promiscuidad"

Este prejuicio injusto asocia la bisexualidad con la infidelidad y la promiscuidad. La capacidad de una persona para ser fiel o promiscua no está determinada por su orientación sexual.

Este estereotipo dañino no solo desacredita a las personas bisexuales, sino que también refuerza nociones perjudiciales sobre la sexualidad y las relaciones. La fidelidad y el comportamiento en las relaciones dependen de las decisiones y valores individuales, no de la orientación sexual.

5. "Las personas bisexuales son transitorias hacia la homosexualidad"

Esta falsa creencia asume que la bisexualidad es solo un paso hacia aceptar una identidad homosexual. La bisexualidad es una identidad en sí misma, no un escalón hacia otra orientación.

Este mito ignora la realidad de que muchas personas bisexuales viven y mantienen su orientación bisexual a lo largo de toda su vida. Esta idea errónea contribuye a la invisibilización y al desconocimiento de la bisexualidad como una orientación legítima y distinta.

Como podemos observar, la bisexualidad, como cualquier orientación sexual, es una parte intrínseca de la identidad de una persona. Es vital que como sociedad avancemos hacia una comprensión más amplia y respetuosa, desmontando los mitos y prejuicios que todavía rodean a la bisexualidad. A través de la educación, la empatía y el respeto, podemos construir un entorno más inclusivo y aceptador para todos.

* Ángel Rull, psicólogo.