Psicología

Límites con personas tóxicas: así es como debes ponerlos

La frontera emocional nos genera seguridad y estabilidad

dos personas enfrentadas

dos personas enfrentadas / 123rf

Ángel Rull

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La convivencia y las relaciones interpersonales son un componente esencial de nuestra vida diaria. Sin embargo, en ocasiones, nos encontramos con individuos cuya actitud o comportamiento puede resultar perjudicial para nuestro bienestar emocional y mental. A estas personas se les suele denominar "tóxicas". Aprender a establecer límites claros y firmes es crucial para preservar nuestra salud y calidad de vida.

Los límites no solo son importantes en las relaciones con los demás, sino que también son esenciales para mantener una relación sana con uno mismo. Sin límites claros, podemos llegar a sentirnos abrumados, resentidos o incluso perder nuestra propia identidad. Por ello, es fundamental aprender a identificar nuestras propias necesidades y cómo comunicarlas de manera efectiva. Este proceso de aprendizaje y aplicación de límites contribuirá significativamente a una vida más equilibrada y satisfactoria.

¿Qué son los límites?

Los límites son las fronteras psicológicas que cada persona establece con respecto a sí misma y los demás. Funcionan como un sistema de señales que indica lo que consideramos aceptable o inaceptable en la conducta de los demás hacia nosotros. Establecer límites es un acto de autocuidado y respeto propio. Permite regular la cantidad y el tipo de interacciones que tenemos, protegiéndonos de posibles abusos o desgastes emocionales.

Los límites pueden ser emocionales, físicos, temporales o incluso digitales, dependiendo del contexto y la relación. Por ejemplo, un límite emocional podría ser no permitir que alguien te humille, mientras que un límite temporal podría ser designar momentos específicos para el trabajo y el descanso. Comprender los diferentes tipos de límites te ayudará a establecerlos de manera más efectiva en diversas áreas de tu vida.

¿Por qué nos cuesta poner límites?

Poner límites puede ser un reto por diversas razones. Culturalmente, a veces se nos enseña a priorizar las necesidades de los demás sobre las propias, lo que puede generar culpa o miedo al rechazo. También puede haber temor a las consecuencias de establecer un límite, como el conflicto o la pérdida de una relación. Además, si no hemos visto modelos de límites saludables durante nuestro desarrollo, puede que no sepamos cómo establecerlos de manera efectiva.

Muchas veces, las barreras para establecer límites son internas, originadas en miedos, inseguridades o creencias arraigadas. Otras veces son externas, como la presión social o las expectativas de los demás. Entender y desmontar estas barreras es un paso fundamental para poder establecer límites saludables y efectivos.

La complejidad de poner límites a las personas tóxicas

Las personas tóxicas a menudo no respetan los límites de los demás y pueden reaccionar negativamente cuando se intenta establecerlos. Esto se debe a que pueden beneficiarse de la falta de límites, ganando control o alimentando su ego a costa del bienestar de otros. Es importante reconocer que poner límites con estas personas puede ser particularmente desafiante, pero también especialmente crucial.

Aprender a identificar comportamientos tóxicos y la manera en que afectan tu bienestar es el primer paso para establecer límites efectivos. Este reconocimiento debe ir acompañado de estrategias concretas para manejar las interacciones, protegiéndote a ti mismo y manteniendo una postura firme y serena.

Trucos para poner límites a personas tóxicas

Establecer límites con personas tóxicas es fundamental para proteger nuestra salud mental y emocional. Estas personas suelen ignorar o transgredir las fronteras personales, lo que puede llevar a situaciones de estrés y malestar. Por lo tanto, aprender a establecer y mantener límites claros y efectivos es una habilidad crucial.

Estos trucos te lo pondrán más fácil:

1. Autoconocimiento

Reconoce tus propias necesidades y sentimientos. Entiende qué comportamientos o situaciones te resultan perjudiciales.

2. Comunicación clara y directa

Expresa tus límites de forma clara y sin ambigüedades. Usa un lenguaje firme pero respetuoso.

3. Ejemplos y práctica

Prepara ejemplos concretos de situaciones donde tus límites fueron cruzados y cómo deseas manejarlas en el futuro. Practica tus respuestas para que te sientas más segura al expresar tus límites.

4. Consistencia

Mantén tus límites de manera consistente. Las personas tóxicas pueden intentar ponerlos a prueba repetidamente.

5. Apoyo externo

Busca el apoyo de amigos, familiares o profesionales que puedan ayudarte a mantener tus límites.

6. Desapego emocional

Intenta no tomarte personalmente las reacciones de la otra persona. Recuerda que tu bienestar es lo más importante.

7. Refuerzo positivo

Cuando logres mantener tus límites, reconócete a ti misma por el esfuerzo y valentía.

8. Celebración de logros

No minimices tus logros al establecer y mantener límites. Cada pequeño paso es una victoria hacia una vida más sana y equilibrada.

9. Aprende a decir no

Practica decir "no" sin sentirte culpable o dar demasiadas explicaciones.

10. Red de apoyo y validación

Es importante rodearte de personas que respeten tus límites y te apoyen en su mantenimiento. Un psicólogo o un grupo de apoyo pueden ofrecer una perspectiva valiosa y validación en tu proceso.

Establecer límites con personas tóxicas es un proceso complejo pero esencial para nuestra salud emocional y mental. Requiere autoconocimiento, valentía y consistencia. Recuerda que poner límites no solo es un acto de autocuidado, sino también una muestra de respeto hacia uno mismo y los demás. A través de este proceso, no solo proteges tu bienestar, sino que también fomentas relaciones más sanas y equitativas. Con práctica, apoyo y determinación, es posible crear un entorno en el que te sientas respetado y valorado.

* Ángel Rull, psicólogo.