Psicología

Estabilidad emocional: cuatro técnicas infalibles para conseguirlo

El equilibrio en nuestras emociones nos conduce a la plenitud

Persona meditando

Persona meditando / 123RF

Ángel Rull

Ángel Rull

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La estabilidad emocional es un estado en el que la persona es capaz de controlar sus emociones y mantener una actitud equilibrada y estable ante situaciones difíciles. Es un estado de equilibrio emocional que permite a la persona afrontar situaciones estresantes sin caer en estados de ansiedad o depresión. La estabilidad emocional se relaciona con la capacidad de adaptación a los cambios, la toma de decisiones, la resolución de problemas, la comunicación efectiva y la gestión del estrés.

La estabilidad emocional es importante para la salud mental y física de la persona, ya que permite manejar el estrés de manera adecuada, evitando la aparición de enfermedades relacionadas con el estrés, como la ansiedad, la depresión y las enfermedades cardiovasculares. También es importante para las relaciones interpersonales, ya que permite a la persona mantener una actitud positiva y constructiva en situaciones de conflicto, mejorando la comunicación y el entendimiento con los demás.

¿Tienes beneficios la estabilidad emocional?

La estabilidad emocional tiene numerosos beneficios para la salud mental y física de la persona. Algunas personas, de manera natural, puede acceder a ella y, por tanto, conectar con todos esos beneficios.

Algunos de los beneficios más destacados son:

·       Reducción del estrés: permite a la persona manejar el estrés de manera adecuada, evitando la aparición de enfermedades relacionadas con el estrés, como la ansiedad, la depresión y las enfermedades cardiovasculares.

·       Mejora de la autoestima: ayuda a la persona mantener una actitud positiva y constructiva, mejorando su autoestima y autoconfianza.

·       Mejora de las relaciones interpersonales: conecta con una actitud positiva y constructiva en situaciones de conflicto, mejorando la comunicación y el entendimiento con los demás.

·       Mayor capacidad de adaptación: hace a la persona adaptarse a los cambios y superar las situaciones difíciles de manera más efectiva.

·       Mayor capacidad de toma de decisiones: nos permite tomar decisiones de manera más efectiva, ya que analizamos las situaciones de manera objetiva y racional.

·       Mayor capacidad de resolución de problemas: nos propicia enfrentar y resolver problemas de manera más efectiva, ya que permite mantener una actitud positiva y constructiva.

·       Mejora de la salud física: está relacionada con una mejor salud física, ya que ayuda a la persona manejar el estrés de manera adecuada, evitando la aparición de enfermedades relacionadas con el estrés, como la ansiedad, la depresión y las enfermedades cardiovasculares.

·       Mayor satisfacción en la vida: nos hace mantener una actitud positiva y constructiva ante la vida, lo que se traduce en una mayor satisfacción en la vida.

¿Qué ocurre cuando no estamos estables emocionalmente?

Cuando no estamos estables emocionalmente, nuestras emociones pueden ser impredecibles e intensas. Las personas que luchan con la estabilidad emocional pueden experimentar cambios de humor repentinos y extremos, pueden sentirse abrumados por sus emociones o pueden tener dificultades para regular sus emociones.

Esto es lo que puede ocurrir cuando no estamos emocionalmente estables:

·       Problemas para regular las emociones: podemos sentirnos abrumados por las emociones y tener dificultades para encontrar maneras saludables de expresarlas y manejarlas. Esto puede llevar a comportamientos impulsivos o poco saludables, como beber en exceso o tener relaciones sexuales sin protección.

·       Dificultades para mantener relaciones interpersonales saludables: puede haber una propensión a discutir o pelear, y dificultades para conectarse emocionalmente con los demás. También pueden tener dificultades para establecer límites saludables y pueden sentirse vulnerables o inseguras en las relaciones.

·       Estrés y ansiedad: podemos sentirnos abrumados por las emociones y tener dificultades para encontrar maneras saludables de hacer frente a los desafíos de la vida. Esto puede llevar a problemas de salud mental más graves, como depresión o trastornos de ansiedad.

·       Problemas en el lugar de trabajo: pueden aparecer dificultades para manejar el estrés del trabajo y/o para trabajar en equipo o recibir críticas. Esto puede llevar a problemas de rendimiento o a la pérdida del trabajo.

Cuatro técnicas para tener estabilidad emocional

La estabilidad emocional es una habilidad esencial para mantener una buena salud mental. Se trata de la capacidad de mantener una sensación de equilibrio y calma emocional en situaciones desafiantes. Cuando somos emocionalmente estables, podemos manejar mejor el estrés, la ansiedad y las situaciones difíciles de la vida. Además, la estabilidad emocional puede mejorar nuestras relaciones personales y nuestra capacidad para tomar decisiones importantes.

Estas cuatro técnicas son efectivas para lograr la estabilidad emocional:

1.     Practicar la meditación

La meditación es una técnica efectiva para lograr la estabilidad emocional. Se trata de una práctica que implica enfocar la atención en el presente, reducir la actividad mental y lograr un estado de calma y equilibrio. Al meditar, podemos entrenar nuestra mente para centrarse en el presente y dejar ir pensamientos negativos o distracciones. Esto puede ayudarnos a reducir el estrés y la ansiedad, lo que a su vez puede mejorar nuestra estabilidad emocional.

Existen varias formas de meditación, pero una de las más populares es el mindfulness. Esta técnica implica concentrarse en el presente, prestando atención a las sensaciones corporales, la respiración y los pensamientos que surgen. El mindfulness puede ayudarnos a desarrollar la capacidad de aceptar las emociones y los pensamientos sin juzgarlos, lo que puede mejorar nuestra estabilidad emocional.

2.     Conectar con la gratitud

La gratitud es una emoción que puede ayudarnos también a mejorar nuestra estabilidad emocional. Cuando somos agradecidos, enfocamos nuestra atención en las cosas positivas de la vida, en lugar de centrarnos en las cosas negativas. Esto puede ayudarnos a reducir la ansiedad y el estrés, y a mejorar nuestra capacidad para manejar situaciones desafiantes.

Una forma efectiva de practicar la gratitud es mantener un diario de gratitud. En este diario, podemos escribir las cosas por las que estamos agradecidos cada día. Esto puede ayudarnos a centrarnos en las cosas positivas de la vida y a desarrollar una perspectiva más positiva en general.

3.     Ejercicio regular

El ejercicio regular puede mejorar nuestra estabilidad emocional al reducir el estrés y la ansiedad. Además, el ejercicio puede liberar endorfinas, que son sustancias químicas en el cerebro que nos hacen sentir bien. El ejercicio también puede mejorar la calidad del sueño y la salud física, lo que a su vez puede mejorar nuestra estabilidad emocional.

Para obtener los beneficios del ejercicio, es importante hacerlo de forma regular. Se recomienda hacer ejercicio al menos tres veces por semana durante al menos 30 minutos cada vez. También es importante elegir un tipo de ejercicio que disfrutemos, para que sea más fácil mantenerlo como una rutina regular.

4.     Aprender a decir "no"

Aprender a decir "no" puede ser una habilidad importante para mejorar nuestra estabilidad emocional. Cuando decimos "sí" a todo lo que se nos pide, podemos sentirnos abrumados y estresados. Esto puede afectar nuestra capacidad para manejar situaciones difíciles al encontrarnos ya desbordados. Por eso, ser asertivos es la mejor forma de propiciar la estabilidad emocional.

La estabilidad emocional es una habilidad muy importante que puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de una persona, ya que está relacionada con su capacidad para hacer frente a situaciones estresantes y mantener relaciones interpersonales saludables. Es por eso que es tan importante aprender a ser más estables emocionalmente.

* Ángel Rull, psicólogo.