"No merezco que me quieran": cómo influye la identidad sexual en esta creencia

El pensamiento limitante "No merezco que me quieran" tiene un impacto negativo significativo en la vida de una persona. Esta idea puede provenir de una variedad de experiencias de vida, incluidos traumas y mensajes subconscientes arraigados. Sin embargo, la identidad sexual puede desempeñar un papel importante en cómo se manifiesta esta creencia y cómo se puede refutar.

¿Puede influir mi identidad sexual en la creencia de merecimiento de amor?

La identidad de una persona, particularmente su orientación sexual, es fundamental. Desde las relaciones íntimas hasta el éxito profesional, la orientación sexual de una persona puede tener un impacto en muchas facetas de su vida.

Debemos tener en cuenta que el merecimiento de amor se fundamenta en creencias inconscientes con las que convivimos. Esta creencia concreta con frecuencia tiene sus raíces en la infancia, cuando los niños captan mensajes subliminales sobre su valor y capacidad para el amor. Por ejemplo, si un niño pequeño crece escuchando que no es lo suficientemente bueno o que no merece amor y afecto, es probable que internalice estos mensajes y los lleve consigo durante toda su vida.

La forma en que se reciben e interpretan estos mensajes puede variar según la orientación sexual de cada uno. Los niños y niñas LGTBIQ+ pueden experimentar graves prejuicios y estigmatización en la sociedad. Estos mensajes desfavorables pueden disminuir su autoestima y hacer que se sientan desvalorizados. Pueden experimentar aislamiento y soledad como resultado de la discriminación y el rechazo, lo que puede servir para reforzar su percepción de que no son dignos de amor y afecto.

La forma en que las personas se relacionan con los demás también puede verse afectada por su identidad sexual. Debido al estigma y la discriminación que enfrentan, las personas LGTBIQ+ pueden tener problemas para tener vínculos y desarrollar relaciones comprometidas. Pueden experimentar sentimientos de rechazo y falta de amor, lo que podría fortalecer la creencia de "no merezco que me quieran".

¿Qué es la homofobia interiorizada?

La homofobia interiorizada describe las actitudes homofóbicas que las personas LGTBIQ+ tienen hacia sus propias identidades y comunidades. Debido a los prejuicios y la falta de aceptación social que la comunidad LGTBIQ+ experimenta a diario en nuestra sociedad, esto puede ocurrir y perpetuarse en una persona.

La presión social para ajustarse a las expectativas de género y sexualidad de la sociedad normativa es una causa común de homofobia interiorizada. Las personas LGTBIQ+ pueden internalizar estos mensajes y creer que su identidad y orientación sexual son inapropiadas o inferiores.

Además, las experiencias traumáticas o desfavorables en la vida de las personas LGTBIQ+ pueden contribuir a la homofobia interiorizada. Un individuo puede internalizar sentimientos de vergüenza y culpa relacionados con su identidad y orientación sexual, por ejemplo, si ha sufrido acoso o rechazo por parte de su familia.

Relación entre homofobia interiorizada y la creencia de que no merezco que me quieran

La homofobia interiorizada de las personas LGTBIQ+ se manifiesta en la forma en que se ven a sí mismas, y un ejemplo de esto es la idea de que no son dignos de amor. Este punto de vista se basa en la idea de que la atracción por personas del mismo sexo es inmoral, sucia o poco saludable y que, como resultado, las personas LGTBIQ+ no son dignas de amor y afecto.

Esta creencia puede ser extremadamente dañina para la salud mental de las personas LGTBIQ+ porque puede generar sentimientos de soledad y baja autoestima. Las personas LGTBIQ+ que experimentan homofobia interiorizada pueden creer que no son dignas de amor o respeto, que no lo merecen o que nunca encontrarán una pareja que realmente las acepte.

La depresión, la ansiedad y el trastorno de estrés postraumático son solo algunos de los problemas de salud mental que pueden derivarse de esto. Además, si una persona LGTBIQ+ alberga una noción arraigada de que no es digna de amor o afecto, puede ser un desafío para ella conectarse con otras personas y crear relaciones satisfactorias.

Rasgos que señalen que creo que no merezco que me quieran y la creencia de que no merezco que me quieran

La niñez y la adolescencia pueden ser la base de la idea de que no merecemos amor ni aceptación, y los factores sociales, culturales y familiares también pueden influir. La homofobia interiorizada o la presión recibida por no ser normativos añade una serie de creencias sobre los vínculos.

Las siguientes características pueden ser una señal de que una persona piensa que no es digna de amor:

1.     La baja autoestima es una de las características más prevalentes en las personas que se sienten indignas de amor. Pueden luchar con la autoestima y sentirse indignos a los ojos de otras personas.

2.     Una tendencia a ser demasiado crítico con uno mismo está presente en aquellos que se sienten desvalorizados. Pueden ser duros consigo mismos y sentir que no están a la altura de los estándares de otras personas.

3.     Dependencia emocional: las personas que se sienten rechazados pueden tener una fuerte necesidad de validación y aprobación de los demás. Es posible que confíen en otras personas para que se sientan bien consigo mismos.

4.     El aislamiento social es otro síntoma. Puede que les resulte difícil construir relaciones duraderas y sientan que no pertenecen a ningún lado.

5.     Las personas que piensan que no son dignas de amor pueden experimentar una severa ansiedad por el rechazo. Pueden evitar situaciones potencialmente hostiles y luchar para confiar en los demás.

6.     Sentimientos de culpa: las personas que piensan que no son dignas de amor pueden sentir culpa por su identidad. Pueden sentir que su identidad de género u orientación sexual es una carga para los demás y que están traicionando a las personas que les importan.

Muchas personas LGTBIQ+ en todo el mundo luchan contra el complejo fenómeno de la homofobia interiorizada. Tiene que ver con aceptar estereotipos desfavorables y pensar que tu identidad de género u orientación sexual te hace indigno para recibir amor o aceptación. Por eso, es importante estar atentos a esta creencia, ya que nos afecta diariamente y genera un malestar tal que impacta sobre nuestra salud mental.

* Ángel Rull, psicólogo.